La Fundación Santa María de Albarracín ha devuelto este jueves a la parroquia de la localidad de Embid de Ariza (Zaragoza) la talla restaurada de la Virgen de las Angustias, del siglo XVI. El final de este trabajo no supone el final de la actividad en la Fundación dado que ya trabaja en el proyecto de restauración de la nave central de la Catedral de Albarracín.

El gerente de la Fundación Santa María de Albarracín, Antonio Jiménez, ha explicado a Europa Press que la talla de la Virgen de las Angustias era "de gran porte y estaba muy estropeada", por lo que el trabajo de restauración ha sido arduo. Aún así, ha asegurado que "ha quedado formidablemente bien, a pesar de que estaba muy deteriorada".

Jiménez ha explicado que, en el proceso de restauración, "hemos tratado de ponerla en condiciones" por lo que "hemos respetado mucho la policromía original" de la Virgen de las Angustias. De esta forma, se comienza afianzando los restos pictóricos originales, eliminando los retos de repintes para, después, hacer un tratamiento profundo de la madera.

Además, el gerente de la Fundación ha señalado que hay que "recomponer la pieza". Una labor que "ha sido muy importante en este caso porque tenía auténticos quemazones" que ha atribuido a la cercanía de la obra a las velas. Asimismo "le faltaba una mano y tenía otras lesiones físicas que ha habido que solucionar".

Una vez acabado este trabajo, no finaliza la labor en la Fundación, porque "estamos saturados", ha comentado. Así, ha explicado que las restauradoras de la entidad "están trabajando en la capilla del Pilar y en la del Bautismo", donde han aparecido unos bajorrelieves que ha calificado de "maravillosos".

También continúa el trabajo en la Catedral, ya que "estamos preparando el proyecto para el levantamiento de la nave central" del templo. A ello, se une los programas de promoción y empleo, así como los cursos y congresos que se celebrarán en Albarracín.