El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, ha instado este lunes a Interior a abrir una investigación interna porque cree que en la 'operación limpieza' de la plaza de Cataluña del 27-M hubo un uso "desproporcionado" de la fuerza policial, por lo que ha sugerido que se abra un expediente disciplinario a los agentes implicados.

En un informe sobre los dispositivos policiales que estableció el Departamento de Interior en la 'operación limpieza' del 27-M y en el asedio al Parlament del 15-J, el Síndic concluye que hubo una "mala administración", que generó la vulneración de los derechos de reunión y manifestación, por una parte, y de acceso y ejercicio de representación democrática, por otra.

En rueda de prensa, tras entregar su informe a la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, Ribó ha denunciado que el 27-M hubo agentes de los Mossos d'Esquadra que utilizaron la fuerza física de forma "desmesurada", alejándose del principio de "proporcionalidad", y que además se decomisaron libros y ordenadores de forma "indiscriminada".

Según recoge el informe, entre las imágenes "estremecedoras por la falta de proporcionalidad" figuran las de una chica sentada en el suelo en una actitud no violenta, que es golpeada y tirada por los pelos por un agente; la de un chico que está solo al que tiran de los pelos y golpean, aunque no ofrece resistencia; y la de un agente que presiona la nariz a un chico cuando este está completamente reducido al suelo.

Ribó ha sido tajante al subrayar que no le consta ningún documento que acredite que los "acampados" actuaran violentamente el 27-M, en contra de lo que sostiene el conseller Felip Puig, que justificó las cargas como réplica a la violencia de los 'indignados' y defendió que los agentes respetaron en todo momento los principios de "proporcionalidad, oportunidad y congruencia".

Por todo ello, el Síndic ha pedido a Interior que abra una investigación interna para valorar si hubo actuaciones "incorrectas" y un uso "desproporcionado" de la fuerza y, si el resultado es afirmativo, sugiere que se abra un expediente disciplinario para evitar la impunidad de estas prácticas policiales.

En opinión de Ribó, en el dispositivo para limpiar la plaza de Cataluña (ante el temor de que hubiera incidentes por la coincidencia con la celebración de la victoria del Barça en la Liga de Campeones), hubo también un déficit en la planificación de los operativos y de coordinación entre Mossos y Guardia Urbana.

En su informe, el Síndic también aprecia errores en el diseño y ejecución del dispositivo de seguridad del asedio al Parlament del 15-J, aunque pone el acento en subrayar que las agresiones a los diputados son "inadmisibles" y penalmente perseguibles, por lo que en este caso se alinea junto a la Fiscalía y a la consellería en la necesidad de actuar penalmente contra las personas que participaron en las agresiones a los cargos electos.