El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, estaría sopesando un adelanto electoral -de marzo- a noviembre para presentar la candidatura de Alfredo Pérez Rubalcaba en un momento en el que los datos del paro arrojen su mejor cifra anual coincidiendo con el fin del periodo estival, según informan este lunes varios diarios.

La cúpula socialista, que en público defiende que el presidente agotará la legislatura, estaría barajando en privado unos comicios en la última semana de noviembre, según publican El País y El Mundo y ya antes adelantó Público y Cambio 16. Sin embargo, otras fuentes socialistas consultadas por 20minutos sugieren que la ley de pensiones, pendiente de aprobación, frenaría un adelanto electoral.

Los defensores del adelanto creen que se deben convocar elecciones en otoño porque es cuando se conocerán los mejores datos del empleo del año, tras la estación veraniega, en la publicación de la EPA del 28 de octubre. Además, opinan que hay tiempo suficiente para que el candidato socialista (Rubalcaba) se forje su imagen de líder en verano y la culmine en la conferencia política del PSOE de septiembre.

Los socialistas, hasta ahora, habían defendido en bloque que seguirían hasta marzo, entre otros motivos, para dar más tiempo a las reformas económicas emprendidas y también para poner distancia de la debacle electoral de los comicios municipales y autonómicos del 22 de mayo.

Que el PSOE está dividido ha quedado patente este lunes. El Lehendakari Patxi López ha reconocido en la Cadena Ser que no maneja los tiempos de Zapatero para decidir si adelanta las elecciones aunque considera necesario terminar las reformas iniciadas "sí o sí, si no queremos caer en la situación de Grecia, Irlanda o Portugal".

Por su parte, el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha sugerido en RNE que la EPA de octubre es una buena razón para el adelanto electoral.

El ministro de la Competencia de la UE, Joaquín Almunia, ha dicho en RTVE que las elecciones deben de ser cuando están fijadas "en marzo". Hasta entonces, ha dicho, hay que hacer "muchas cosas" como afianzar la reforma laboral o aprobar los siguientes presupuestos.

El presidente en funciones de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha sido el más atrevido al afirmar que "si la situación va a seguir siendo así de extraordinariamente complicada, tal vez adelantar las elecciones sea conveniente".