Los acampados en Sol han comenzado a reducir la extensión del campamento para "optimizar el ritmo de trabajo" y evitar los problemas de sanidad y seguridad que reconocen que tienen. "Los principales incidentes se están registrando a nivel de infraestructuras y de convivencia", aseguró una de las participantes de la acampada.

Por este motivo, este lunes por la tarde se empezó a debatir la mejor forma de "reestructurar" el asentamiento tras decidir permanecer en Sol en la asamblea del pasado domingo. De momento, se ha desmontado el segundo puesto de Enfermería y la estructura metálica semicircular que se instaló la semana pasada, según anuncio uno de los portavoces que participó en la comisión de comisiones. "Están preparando unos barracones para instalarlos junto al Oso y el Madroño en cuanto se llegue a un consenso", continuó.

Respecto a las carpas que se vayan a desmontar, acordaron sacar el máximo partido a los materiales que se pudieran aprovechar para apuntalar y reforzar el resto de stands. Además, criticaron la actuación de algunas personas que están acampadas en Sol y "parasitan el movimiento". "Si nos echan de aquí por un problema de orden público, habremos perdido nuestra credibilidad", apuntaba otro participante de la comisión de comisiones.

En esta reunión, se propuso también reordenar la acampada a nivel organizativo. "Tenemos que crear un organigrama más claro, sin tantos grupos sueltos", defendió uno de los participantes. "Recordad que el movimiento 15-M no es sólo la acampada", concluyó. En cualquier caso, la reestructuración de la acampada será uno de los temas que se traten en la asamblea general que se celebrará esta tarde a las 20 horas en la Puerta del Sol.