La Dirección General de Obras Hidráulicas y Ciclo Integral del Agua, dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, ha finalizado las obras de saneamiento y pavimentación en la localidad de Lamiña, perteneciente al municipio de Ruente.

Este proyecto ha contado con una inversión de 146.820 euros por parte del departamento dirigido por Francisco Martín, consejero de Medio Ambiente en funciones.

Esta actuación ha consistido en la mejora de la red de canalización de pluviales de la zona Este de la población, que comprende las calles de la Fuente de Arriba, Fuente Roñosa y Barrio de la Iglesia, en las que se han incluido colectores y cunetas, se han modificado los sumideros generadores de malos olores con la colocación de un sifón, y se ha añadido un colector y sumideros en la zona Oeste.

Por otra parte, se ha reparado y mejorado el pavimento de varios viales en estas mismas zonas, así como en otras que presentaban varias deficiencias como el colapso del firme, fuertes blandones o carencia de pavimento en algunos viales.

Además, con esta actuación también se han solucionado los problemas de heladicidad y deslizamiento que se producían en la época invernal debido a la fuerte pendiente. Este problema se ha solventado con la utilización de aglomerado asfáltico en caliente con características antideslizantes.

El material elegido para la construcción de los colectores y los salvacunetas ha sido el hormigón, debido a que las pendientes existentes son "bastante grandes" y, por lo tanto, la rugosidad no se considera un factor decisivo. Además, este material permite una mayor resistencia frente a la erosión causada por los arrastres de sólidos.

De este modo, la actuación realizada ha permitido la resolución de deficiencias prioritarias en la red de saneamiento de este núcleo, que además de cumplir su función sanitaria, permitía el drenaje superficial de las aguas pluviales, cuyo caudal de escorrentía aumentaba "considerablemente" en determinadas épocas del año.