Dos responsables de una empresa de refrigeración acusados de dos delitos contra los derechos de los trabajadores, en concurso con otro de homicidio imprudente, B. B. R. y J. P. A., han reconocieron los hechos que les imputaba la fiscal delegada de Siniestralidad Laboral del Principado, Esperanza González Avella, y han aceptaron una condena que suma un año y seis meses de prisión y el pago de una multa de 1.800 euros.

Según informó la Fiscalía, el juez les ha condenado a seis meses de prisión y multa por el delito contra los derechos de los trabajadores, y a un año de cárcel por el homicidio imprudente, mientras que la Fiscalía retiró los cargos contra el tercero de los acusados, S. D. O. D.

El juicio, que se celebró con acuerdo entre las partes, estaba previsto para los días 11, 13 y 15 de esta semana en el Juzgado de lo Penal número dos de Oviedo.

Según el relato de los hechos del Ministerio Público, sobre las 16 horas del 28 de diciembre de 2005, el trabajador, de 42 años, estaba realizando tareas de instalación de paneles de aislamiento en la sala de fabricación de quesos de una empresa de productos lácteos, en Siero. Cuando procedía a colocar un panel en el techo, se cayó al suelo golpeándose con una esquina de la instalación en la cabeza, lo que le originó una lesión encefálica que le produjo la muerte el 9 de enero de 2006.

Para el fiscak, "el trabajador fallecido y el resto de trabajadores de las empresas no disponían de ninguna protección individual ni colectiva". Además, el sistema de trabajo "no era adecuado ni seguro", por lo que debían utilizarse andamios modulares o plataformas elevadoras móviles de personal. La compañía tampoco disponía de documentación sobre evaluación de riesgos ni un plan de seguridad y salud.