El Ayuntamiento de Zaragoza coordinará el proyecto "Redistribuye" una red de distribución para atender las necesidades básicas de alimentación de personas de la ciudad que no perciben ninguna ayuda y en el que participan una treintena de empresas de alimentación y mayoristas, entidades sociales, junto al Banco de Alimentos, Mercazaragoza, la Universidad de Zaragoza y las obras sociales de Ibercaja, CAI y 'la Caixa'.

En este proyecto "nace con vocación estructural, de permanencia" ha destacado el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, al detectar que la situación económica genera problemas personales y familiares "dramáticos que hay que atender".

Como dato ha expuesto que el 60 por ciento de los aragoneses se concentran en Zaragoza, de los que un 10 por ciento "no solo tiene problemas para llegar a fin de mes, sino que no pueden atender sus necesidades básicas de alimentación".

Tras reconocer que hay "muy muchos recursos, pero están dispersos", ha detallado que el objetivo de este proyecto es "coordinarlos para lograr unos mejores resultados" y en esta coordinación ha calificado de "fundamentales" a Mercazaragoza, el Banco de Alimentos, además de las empresas, las entidades sociales y las obras sociales de las entidades de ahorro y "por supuesto, el Cuerpo de Voluntarios de Zaragoza".

"Tenemos que dar un paso al frente en el que el Ayuntamiento coordine los recursos públicos y privados para lograr una eficiencia en su distribución", ha sintetizado Belloch durante el acto de presentación de "Redistribuye".

Se trata de un proyecto "solidario", ha precisado el alcalde, para enfatizar que la finalidad es que "ningún zaragozano pase hambre y si atraviesa una situación de dificultad que sea con dignidad y privacidad", ha descrito Belloch para asegurar que en el proyecto primará "el control, rigor y la transparencia".

Otra característica que ha destacado Belloch es que se "estimula el compromiso social y la solidaridad de los ciudadanos, que es un aspecto más espiritual que material".

DE 400 A MIL M2

El director de Mercazaragoza, Constancio Ibáñez, ha subrayado la "colaboración total" con el Banco de Alimentos, cuya sede se localiza en las instalaciones de Mercazaragoza, al detallar que "ningún excedente de producción, ya sea perecedero o no se ha quedado sin destinar al Banco de Alimentos".

Ibáñez ha explicado que la vocación de Mercazaragoza es "estar" y "no enviar los productos a otro centro de recepción que no sea el Banco de Alimentos porque es potente y funciona".

Es un proyecto a tres bandas ha dicho, al indicar que la actual sede del Banco de Alimentos, de 400 metros cuadrados, se trasladará a otras dos naves, de 500 metros cuadrados cada uno, con las cámaras frigoríficas necesarias para mantener la cadena del frío.

Además, se contará con las empresas de agroalimentación porque Zaragoza "es potente en este sector" y se unirá la distribución mayorista con la producción en origen.

También formarán parte las cooperativas aragonesas y empresas como Arento o Pastores que ofrecen productos transformados, al tiempo que se suman las asociaciones de agroindustria, que integran a unas 120 empresas, y las grandes cadenas distribuidoras.

Aumento del 22% EN 2012 SOBRE 2011

El presidente del Banco de Alimentos, Antonio Tomás, ha informado de que atienden a 22.943 personas en 194 centros asistenciales y los 1,7 millones de kilos que han distribuido este año supone un 22 por ciento más que hasta la misma fecha del anterior ejercicio.

Tomás ha manifestado que el objetivo es recuperar los excedentes alimenticios que se distribuyen a los más necesitados para anunciar que "trabajaremos incansablemente para que el proyecto salga adelante".

Al respecto, ha recordado que el lema del Banco de Alimentos es 'Ellos te necesitan, a ellos les falta' y ha esgrimido que "dar ensancha el corazón y lo hace más grande", para reconocer que sin la colaboración del Ayuntamiento "este proyecto no saldrá adelante".

Solidaridad frente a competitividad

El rector de la Universidad de Zaragoza, Manuel López, ha apuntado que la colaboración de la Institución docente es de apoyo y colaboración, de apoyo "responsable y serio" ante la situación difícil de la sociedad en exclusión, que ha preferido denominarla "en riesgo de vulnerabilidad", mientras que la colaboración se aporta en términos de solidaridad.

Al respecto, ha precisado que "cuando hace falta solidaridad no se puede hablar de competitividad y solo se puede exigir generosidad y altruismo". De este modo, la institución académica aporta su colaboración en aspectos técnicos, ha dicho.

Por su parte, el consejero municipal de Acción Social y Deportes, Roberto Fernández, ha avanzado que las previsiones apuntan a que podría haber alrededor de 20.000 demandantes en el primer trimestre del año, de los que entre 5.000 y 6.000 serían nuevos, para augurar que "irá incrementándose" por lo que se pone en marcha este plan. Estos datos contrastan con los 63 kilos por persona de comida en buen estado que se desperdician anualmente.

La prestación será gestionada por los asistentes sociales de los centros municipales, ha informado Roberto Fernández, para avanzar que en una primera fase se repartirán lotes de comida en los centros cívicos y, para mantener la dignidad y no estigmatizar a los que necesiten los lotes, los voluntarios "pueden colaborar en llevarlos a sus casas" porque además hay gente con movilidad reducida.

Se intentará crear una red con los equipamientos municipales como centros cívicos, juntas de distrito y centros de convivencia para recoger los lotes, que se distribuirán con la logística de Mercazaragoza y con la ayuda de los voluntarios llegando hasta las casas de los demandantes.

La campaña de información se realizará en diciembre porque la puesta en marcha del plan será en enero. Económicamente, "la voluntad del proyecto nace sin que cueste un euro porque si tenemos el 60 por ciento de las ayudas de urgente necesidad dedicadas a la alimentación y con una cuantía de 4,8 millones de euros, se puede regularizar esa partida si hay que hacer un aporte", ha dicho Fernández, para apostillar que "esas partidas se modularán en función de las necesidad de este proyecto".

Para los que no tienen

Fernández ha querido dejar claro que el Banco de Alimentos seguirá haciendo su trabajo y para otra "cantidad de ciudadanos" que no perciben productos por el Banco de Alimentos, ahora, por medio de la red pública, accederán a esas ayudas. "Es un plan que nace para los que no tienen", ha recalcado.

Así, ha insistido en que los servicios que presta el Ayuntamiento se mantienen y ha citado las comidas a 3 euros en los centros de mayores o las becas de comedor por medio de las juntas de distrito y "se verá" como se resuelve el Plan de emergencias contra la exclusión social aprobado por el Pleno municipal.

Al respecto, ha incidido en que todas las partidas de acción social de este año van a seguir y además habrá un Plan de emergencia contra la exclusión social con 10 millones de euros más, que es coyuntural. Así, este Plan se podría incluir en el proyecto "Redistribuye", que será estructural.

Ha abogado por recortar los tiempos de espera para recibir las ayudas y se estudia incluir en las bases de ejecución presupuestaria una cláusula para que "permita una agilidad total para reducirlos porque hay hasta dos meses de resolución administrativa, que es un tiempo que me parece lamentable y hay que reducirlo al mínimo".

El objetivo es que "los ciudadanos, en base a la justicia social, tengan todos los recursos en unos momentos en los que se va a poner muy difícil la convivencia por una falta de paz social debido a la tensión que genera la crisis y la falta de redes de cobertura", ha resumido.