El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Dirección General de Desarrollo Rural y Política Forestal, ha encomendado la ejecución de la obra del Camino Natural Sendero GR-132, fase 1 de La Gomera, un sendero de gran recorrido con una longitud de 67 kilómetros, que contará con una inversión de 1.152.077 euros.

Los trabajos se distribuirán por las zonas oeste y sur de la isla abarcando los municipios de Vallehermoso, Valle Gran Rey y Alajeró con el objetivo de mejorar la parte oeste y sur del 'Sendero Circular' de la isla.

La delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento, valora en un comunicado esta importante inversión para la isla y ha puesto de manifiesto que una vez más el Gobierno central muestra su sensibilidad con la isla colombina.

Las actuaciones previstas incluyen el acondicionamiento general del sendero, su delimitación, y el acondicionamiento de zonas pedregosas, así como la construcción y reparación de firme de empedrado tradicional, la colocación de escalones y la contención de taludes con muros de mampostería.

También se llevarán a cabo drenajes, la colocación de tuberías y ejecución de badenes, además de la colocación de señalización y elementos de protección en el camino y la ejecución de pasarelas peatonales.

Este proyecto ofrece al usuario nuevas posibilidades de ocio y una forma de turismo alternativa y respetuosa con el entorno, permitiendo el ejercicio de actividades educativas y culturales que ayuden a una mayor integración y mejor conocimiento del entorno.

Educación medioambiental

La obra, que cumple con los criterios del Programa de Caminos Naturales desarrollado por el Ministerio, se une a los más de 6.600 kilómetros existentes de Caminos Naturales construidos desde el año 1993.

Con ello se contribuye a diversificar la actividad económica de la región potenciando la oferta turística, a conservar los espacios naturales a través de la educación medioambiental, a preservar los recursos de la zona de influencia del Camino Natural, y a favorecer la conservación del patrimonio cultural y tradicional, dotando de nuevas funcionalidades a infraestructuras abandonadas, permitiendo así el cuidado y transmisión del legado cultural de la zona.