Las Cerillas que desde las Olimpiadas de Barcelona forman parte del paisaje del Vall d’Hebron son un ejemplo de escultura que retrata los objetos más cotidianos. Esta pieza urbana que ya se puede considerar un elemento distintivo de la ciudad es obra de los escultores Claes Oldenburg y Coosje van Bruggen, un sueco y una holandesa con más de 30 años de carrera.La Fundació Miró acoge desde hoy una muestra de la obra de estos artistas de lo cotidano. El público podrá, además, conocer el proceso que siguen Oldenburg y Van Bruggen con sus esbozos, dibujos, maquetas y obras.