Al menos así lo cree este sector, que está estudiando recuperar esta figura, que funciona con éxito en ciudades como Gijón. Para los empresarios es imprescindible un incremento de la seguridad nocturna, sobre todo los jueves, viernes y sábados. Conscientes de las dificultades para conseguir más Policía, creen que el retorno de los serenos pondría fin a sus problemas. Es un tema ya tratado con el Ayuntamiento hace tiempo, pero los hosteleros interesados quieren retomar las conversaciones a corto plazo. Este modelo de seguridad también se baraja en A Coruña.