El partido de la liga francesa que este sábado disputaron el Metz y el Olympique de Lyon estuvo suspendido durante una media hora debido a un petardo que explotó justo debajo del guardameta del equipo visitante, Anthony Lopes.

Estaba a punto de cumplirse la primera media hora del partido y el Metz acababa de marcar el 1-0. Lopes, el portero lyonés, estaba siendo atentido por los servicios médicos tras haberse lastimado en la jugada del tanto.

En ese momento, un petardo lanzado desde la grada alcanzó al guardameta y estalló, lo que motivó las protestas de los jugadores de ambos equipos.

El colegiado del encuentro decidió mandar a los jugadores al vestuario y el partido no se reanudó.