El capitán del Barcelona, Carles Puyol, cree que tener a Ronaldinho en el equipo "es un honor" y no coincide con la apreciación de que el equipo de Frank Rijkaard dependa del juego de Leo Messi.

En unas declaraciones publicadas en la página web del Barcelona, Puyol ha admitido que en torno a Ronaldinho "se ha creado un debate donde no lo hay", porque "Ronnie es importantísimo para nosotros y si queremos ganar títulos le necesitamos".

Puyol ha disculpado al brasileño al opinar que "no siempre puedes jugar bien", pero destacó "la buena actitud", así como "el trabajo" y el hecho de que Ronaldinho es "un jugador muy importante" para el Barcelona.

El brasileño es feliz en el Barça

Considera que el '10' azulgrana es feliz en Barcelona, pero "cuando siempre se está hablando de cosas", al final "acaba afectando". Puyol ha insistido en que Ronaldinho tiene todo su apoyo: "Él lo sabe, yo he hablado muchas veces con él y el equipo está a su lado".

El defensa barcelonista ha asegurado que "cualquier equipo querría tener a Ronaldinho" y recalcó que el jugador es propiedad del Barça. "Disfrutemos de él (..), para mí tenerle en mi equipo es un honor".

En el otro extremo, Messi

En el otro extremo se encuentra Leo Messi. "Está haciendo una temporada espectacular. No se le debe dar toda la presión (..). Hay que repartirla (..), pero es verdad que está jugando muy bien, está creando peligro, marcando goles. La afición y la prensa te ponen arriba de todo, pero eso no quiere decir que Ronnie no sea importante y que ahora todo dependa de Messi", ha dicho.

"No hay Messidependencia, pero es un jugador importante que ahora mismo está en un momento extraordinario y lo debemos aprovechar. Es un jugador diferente que siempre te puede resolver un partido", argumentó.

Sobre el código de conducta...

Puyol también habló sobre el código interno de conducta. Ha dicho que los capitanes todavía no habían hablado con el resto del equipo. "Tenemos que hacerlo en breve. Lo hemos hablado entre los capitanes y ahora hablaremos con el equipo", añadió.

En todo caso, Puyol ha admitido que los jugadores se sienten más vigilados por el entorno como "consecuencia de la temporada pasada", en la que "todos nos llevamos una gran desilusión y la gente no quiere que nos vuelva a pasar".

Todas estas cuestiones no son para Puyol "ningún problema", siempre y cuando "se respete la vida privada", aunque recalcó: "Somos gente joven y también debemos tener libertad".