El estadounidense Michael Phelps volvió a demostrar que sigue siendo el mejor nadador del mundo, pese a haber estado tres meses sancionado por una polémica foto en la que salía fumando marihuana, y regresó a la competición en la reunión de Charlotte Ultraswim con victoria en las finales de 200 libre y 100 mariposa.

El ganador de ocho oros en los Juegos de Pekín 2008 fue superado en las series del doble hectómetro estilo libre -marcó el tercer mejor crono con 1:50.46-, pero en la final demostró ser de nuevo el más fuerte y se impuso con 1:46.2, por delante de sus compatriotas Peter Vanderkaay y Darvis Tarwater.

Menos de una hora después, consiguió también el triunfo en los 100 mariposa con un crono de 51.72. "Estaba algo nervioso. No sabía cómo me sentía realmente, pero lo principal es que tengo ganas y pasión por competir", afirmó el norteamericano, quien reconoció que estaba "muy contento" porque "este es un excelente inicio para estar preparado para el verano", en el que se disputarán los Mundiales de Roma.

Phelps superó con nota su regreso. Pese a esos nervios, por en la mañana del viernes dio la sensación de estar tranquilo, al mostrarse sonriente, bromear con otros competidores y firmar autógrafos. "Sentía más presión que en Pekín. Allí parecía que había menos cámaras", dijo no obstante.