Los Lakers nos tienen acostumbrados a presentar en cada partido una cara distinta. A veces son ese equipo imparable que asume el rol de favorito al título, y en otras se muestra como un conjunto paupérrimo, aburrido y previsible que puede ser vencido por cualquier rival. Unas veces es Dr. Jekyll y otras Mr. Hyde. En esta ocasión, contra los Trail Blazers de Portland, tocó ser Mr. Hyde.

Y es que los angelinos no jugaron a nada la pasada noche ante Portland que ganó el partido por 112-103. Muy bien el equipo de Sergio Rodríguez que desbordó a los visitantes en todo momento con un juego lleno de buenos detalles y con tres hombres que destacaron sobre el resto: LaMarcus Aldridge (22 puntos y 16 rebotes), Channig Frye (22 puntos y 11 rebotes) y Brandon Roy (23 puntos y 12 asistencias). El trío mágico brilló y regaló a sus aficionados la revancha contra los Lakers después de la derrota de la semana pasada.

En el cuadro angelino sólo jugaron Pau Gasol y Kobe Bryant. Y lo hicieron a ratos. El jugador español terminó con un nuevo doble-doble al lograr 21 puntos y 13 rebotes. Buenos números en una noche irregular para el ala-pívot, que aparecíó en determinados momentos y sin ser decisivo.

Mejor valoración merece Bryant y sus 34 puntos. El escolta, igual que Gasol, estuvo desaparecido sobre todo en el primer tiempo pero en el último cuarto protagonizó una remotanda de los Lakers que parecía imposible. El milagro se llamaba Bryant, eso está claro, pero en esta ocasión llegó demasiado tarde.

El choque siempre estuvo de lado de los locales, que lograron ventajas de hasta 16 puntos en el tercer cuarto. Una lección de humildad para los Lakers de cara a los próximos partidos. Sólo en el cuarto decisivo los Blazers perdieron los nervios, fruto de la inexperiencia de un equipo joven, y casi echaron por tierra el partido.

Derrota de Navarro

Por otro lado, los Memphis Grizzlies de Juan Carlos Navarro perdieron ante los Suns de Phoenix por 127-113 en un gran partido del ala-pívot Amare Stoudemire que consiguió doble-doble con 28 puntos y 11 rebotes

Navarro aportó nueve puntos en 33 minutos. El escolta español anotó un triple y dejó su marca en 148 en 78 partidos que ha disputado, a 10 de empatar la mejor de todos los tiempos, que es de 158 y la consiguió Kerry Kittles, en la temporada de 1996-97 con los Nets de Nueva Jersey.