La línea recta quizá sea el camino más directo entre dos puntos, pero posiblemente el menos emocionante. Entre un torneo en Bulgaria que acaba el 26 de agosto y otro en Finlandia que arranca el 28 puede darse una kilométrica odisea de 24 horas con cinco países y tres medios de locomoción implicados. Y el final feliz de una presea pionera. Tal ha sido la última vivencia de Lili Fernández y Elsa Baquerizo.

La pareja del vóley-playa femenino se colgó la plata en Aland,  la isla del Báltico sede de la penúltima cita del World Tour. Firmaban el primer metal español en la copa del mundo femenina. Perdieron la final, pero en el camino derrotaron a las brasileñas Larissa y Juliana, las n.º 1 del mundo. Y negociaron los incordios de las tortícolis y las gastritis. La plata fue el broche a un periplo que se inició con un bronce en el búlgaro Varna Masters. "Volvíamos por carretera a Constanza (Rumanía), el destino de la ida –cuenta Lili–. Las tres horas de viaje fueron cinco y media por carreteras infernales".

Desde Rumanía, un desplazamiento en avión hasta Viena, en Austria, donde pernoctaron. "Al día siguiente tomamos un avión hasta Estocolmo (Suecia) y, allí, el barco que nos dejó en Aland. Llegamos media hora antes del primer entrenamiento", recuerda.

La alicantina y la madrileña no han dejado de crecer deportivamente desde su apuesta, son la pareja más joven del circuito, en junio conquistaron un bronce en los Europeos y, ya en Londres, vivieron su primera experiencia olímpica. ¿Se traduce esa evolución en una mayor consideración? "Nos respetan más, claro, pero aún somos muy irregulares. Podemos hacer un partido brillante y al siguiente parece que no sabemos jugar. Tenemos que buscar la regularidad", analiza Lili.  ¿Y cómo se mejora? "Con paciencia a la hora de afrontar las situaciones estresantes, con tolerancia al fallo y evitando que un error te afecte en el siguiente punto. Es un deporte muy mental", añade.

Quedan cerca los días de ahorro y vuelos low-cost. Pero las aventuras prosiguen.

Inquilinas de la 15ª posición de la clasificación mundial, Fernández y Baquerizo defienden este fin de semana su título en los Nacionales de Vóley-Playa de Laredo, un oro que han logrado los últimos cuatro años. «Elsa tiene dos exámenes hoy y no llegará hasta la medianoche, por lo menos. Y mañana jugamos a las nueve de la mañana», comenta Lili. "Nos pasa de todo, pero dentro de lo normal".