No le gustó mucho a Vicente del Bosque lo que vio el pasado sábado en el triunfo in extremis (3-2) ante Arabia Saudí: "No podemos presumir de un partido bueno, en algunos momentos ante la presión de ellos fuimos incapaces de dar respuesta, repetimos pases atrás con poca profundidad".

Es cierto que los jugadores llevaban 15 días sin jugar y que les faltaba ritmo de competición, pero el seleccionador quiere empezar ya a recoger los frutos del intenso trabajo que están llevando a cabo en la concentración de Austria.

Por eso, este jueves, ante Corea del Sur (18.00 horas; La1), en el segundo amistoso de preparación para el Mundial de Sudáfrica, Del Bosque realizará algunos cambios en la alineación inicial con la intención de darle más protagonismo a los extremos, aunque no variará el esquema táctico (4-5-1) heredado de la etapa de Luis Aragonés y que él ha modificado con sutileza hacia un 4-4-2 o un 4-3-3 si la situación lo requiere.

El sevillista Jesús Navas y el valencianista Juan Mata serán los responsables de vivir pegados a la línea de cal. España ganará en profundidad.

Jugarán Reina y Valdés

Otra de las novedades estará en la portería. Casillas, que hoy hace diez años debutó con la selección española, en un amistoso ante Suecia, no disputará ni un minuto. Pepe Reina jugará una parte y Víctor Valdés, que debutará como internacional absoluto, la otra. También está previsto que Cesc Fábregas dispute sus primeros minutos tras su lesión.

Torres deberá esperar

"Ha entrenado cada día mejor y seguramente sea uno de los que juegue contra Corea", confirmó el seleccionador, quien aún no ve listo a Torres: "No vamos a tomar riesgos con Fernando".

Así, España podría  salir con Reina; Arbeloa, Marchena, Albiol, Capdevila; Javi Martínez, Busquets; Navas, Iniesta, Mata; y Villa. Ante los asiáticos, la selección tendrá también la oportunidad de vengar la polémica eliminación en los penaltis que sufrió el conjunto dirigido entonces por José Antonio Camacho en los cuartos del Mundial de Corea y Japón de 2002. El colegiado egipcio Al Ghandour, que anuló un gol legal a Morientes, aún sigue en las pesadillas españolas.