Alrededor de una veintena de afectados por el conflicto de las participaciones preferentes ha obligado este miércoles a suspender durante varios minutos el pleno de la Cámara autonómica al que acudían como público, exigiendo a gritos que los recibiese el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para buscar soluciones a una "estafa" que los deja "en la calle".

"¡Presidente, respétanos y defiéndenos!", demandaron a gritos los afectados tras el debate de las preguntas que la oposición formula al presidente. En una de ellas, interpelado por el BNG, Núñez Feijóo ratificó "su compromiso" con la solución de un problema "heredado de gobiernos anteriores".

Insatisfechos con los argumentos del presidente, los afectados, que llevaban camisetas amarillas con la consigna de "NCG Banco preferentes y subordinadas soluciones", se levantaron y exigieron un encuentro con el presidente. "¡Es su responsabilidad! ¡Somos gallegos! ¡Nos tiene que atender! ¡Esto es una vergüenza!", clamaron los afectados justo en el momento en el que Feijóo abandonaba el hemiciclo.

"Señor Rueda, por favor", continuaron los gritos aprovechando que el número dos del Gobierno y del PPdeG, Alfonso Rueda, permanecía en el hemiciclo. Finalmente, la jefa del Legislativo, Pilar Rojo, intervino para recordar que suspender una sesión del Parlamento puede ser constitutivo de delito y los afectados abandonaron el hemiciclo instando a los populares "a privatizar también" la Cámara autonómica.

Ya en los pasillos del Pazo do Hórreo, fue el conselleiro de Economía, Javier Guerra, el que se dirigió a los afectados, a los que aseguró que la Xunta está trabajando para buscar soluciones a su conflicto y que cumple sus compromisos. Varios de los presentes pusieron en duda este extremo e insistieron en que querían hablar con el presidente, al que instaron "a dar la cara".

Mientras, en el exterior del Pazo do Hórreo se desarrolla una nueva protesta del colectivo de afectados por este producto que fue comercializado por las antiguas cajas gallegas y por otras entidades bancarias. La concentración tiene lugar dos semanas después de que el pasado 30 de marzo, una manifestación de afectados acabase con un grupo de ellos ocupando la sede de la Compañía de Radio Televisión de Galicia (CRTVG), después de que protestasen ante el Parlamento y llevasen sus quejas ante el Valedor do Pobo.