Así lo explicó hoy antes de participar en la inauguración de una jornada de formación que organiza CECAP Asturias en el Hotel de la Reconquista, en Oviedo. El presidente de la patronal no descartó un cambio de opinión en el Ejecutivo aunque reconoció que será difícil por las necesidades de recaudación.

Un año "malo"

Por otra parte, incidió en que pese a las múltiples previsiones de brotes verdes, "la verdad es que estamos en crisis y 2010 será un año malo". "Hemos perdido un tiempo precioso en aceptar la realidad y se han hecho tantas previsiones como rectificaciones", criticó.

Además, aseguró que la postura del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de medir la recuperación en función de la mejora del desempleo es "una equivocación", ya que será el índice que "más tarde se va a recuperar".

Más positivo se mostró respecto a los datos del PIB que a su juicio registrará este año una evolución positiva frente al descenso del 3,6 por ciento del último ejercicio. Consideró además que en Asturias el grado actual de ejecución de obra pública amortigua los efectos de la crisis, aunque la comunidad "no es una isla" y forma parte de España y de Europa.

Preguntado por la posibilidad de un pacto estatal por la economía, dijo que no cree que este llegue a producirse y recordó que independientemente del mismo, los Gobiernos están para tomar medidas y decisiones que contribuyan a salir de la crisis. "Para gobernar", sentenció.