"La verdad es que el público se ha puesto en contra de mí, pero yo no me he puesto en contra de ellos. Me han motivado más y me han dado más fuerzas para la victoria. No tengo nada en contra de ellos, pero si se ponen contra mí, eso te puede salir a favor y en contra, y hoy les ha salido en contra, porque yo he jugado mejor cuando me han insultado y gritado", dijo Verdasco.

"Evidentemente que estando en el partido estás más concentrado en lo que tienes que hacer. Paso más nervios cuando estoy fuera, con una afición como la que había aquí. He sabido sobreponerme a todos esos gritos en mi contra y sacar lo mejor de mí", prosiguió el jugador madrileño.

Verdasco ponderó el trabajo que había hecho Emilio Sánchez Vicario con ellos, alentándoles en todo momento. "Él siempre, tanto a mí como a todos nuestros compañeros, te anima en los momentos difíciles y en los que no. Cuando el partido va rodado es más fácil, pero, cuando no, necesitas a un capitán motivador para que te saque del bache. Emilio siempre ha estado ahí para que diera el mejor nivel posible", expresó.