Con la llegada del buen tiempo y las altas temperaturas, el plan estrella es ir a la playa, debiendo ir siempre con adecuada protección, tanto para la piel a través de las cremas solares como para proteger la salud ocular, con las gafas de sol, un complemento imprescindible para evitar problemas de visión.
Las gafas de sol protegen los ojos de los rayos ultravioletas, pero también lo hacen de la arena, que puede llegar a ser realmente molesta si se introduce en la cavidad ocular, y también protege la piel que se encuentra alrededor de los ojos.
Cómo elegir las mejores gafas de sol para la playa
Para elegir las mejores gafas de sol para ti, debes tener en consideración diferentes factores, sobre todo si quieres minimizar riesgos y no equivocarte. Para empezar, hay que valorar su filtro solar, que en función de su capacidad para absorber la radiación solar están enumerados del 0 al 4, contando con mayor protección cuánto mayor sea este número. Lo más recomendable es elegir unas con filtro 3, capaces de absorber hasta el 92% de la radiación.
Otra de las características a valorar es el tipo de cristal, ya que podemos encontrarlos de diferentes tipos, siendo los más habituales los siguientes:
- Fotocromáticos: Con ellos, los cristales se vuelven más oscuros según la intensidad de los rayos del sol.
- Polarizados: Son ideales para evitar el reflejo en el agua y otros deslumbramientos, por lo que son una buena opción para todo aquel que practique deportes de agua.
- Antirreflejo: Se trata de cristales capaces de bloquear deslumbramientos que llegan de otras superficies, pero también los de su propia superficie.
- Espejados: Se encargan de crear una barrera que protege los ojos frente a los rayos ultravioleta, absorbiendo hasta un 10% adicional de radiación solar.
Por supuesto, y para asegurar una larga resistencia, es importante apostar por la compra de unas gafas de sol de materiales de calidad, ya que estarán expuestas a la radiación solar, la arena y el agua salida, unas condiciones que deben ser capaces de superar.
En el caso de que seas alguna persona con problemas de visión, será siempre recomendable que apuestes por unas gafas de sol para la playa graduadas, de forma que no pongas en riesgo tu salud ocular utilizando unas gafas no apropiadas.
Gafas de sol acuáticas, para usar durante el baño
Además de los modelos convencionales, hay que tener en cuenta que, si eres una persona a la que le gusta hacer deportes en el agua, están a la venta gafas de sol para deportes acuáticos, las cuales deben contar con un 100% de protección ultravioleta y ser polarizadas, ya que te ofrecerán una visión más nítida de los colores al mismo tiempo que protege tus ojos de los rayos de sol reflejados en otras superficies. Dependiendo del deporte que practiques, necesitarás de un grado de polarizado u otro.
Por otro lado, deben ser gafas de montura resistente, cómoda y que tenga una buena sujeción. Para ello hay que tener en cuenta los movimientos que se van a realizar en la actividad acuática para determinar si pueden ser unas gafas de varillas o bien si se debe optar por un cierre completo para evitar que se puedan caer durante la práctica deportiva.
En lo que respecta a tratamientos, el más habitual es apostar por un antirreflejo, si bien existen otras alternativas interesantes para unas gafas deportivas como recubrimientos específicos, efecto espejo, anti rayado, etcétera.
Las gafas de sol acuáticas son recomendadas para diferentes prácticas deportivas, tales como la vela, el surf, canoa, windsurf, kayak, navegación deportiva o de recreo, etcétera. Además, para deportes bajo el agua como el buceo o la natación se deben elegir gafas específicas con tratamientos especiales.
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