Mejor prevenir que curar. Así empieza el anuncio de una conocida clínica estética de Madrid que trata de convencer a las jóvenes de comenzar pronto con las inyecciones de bótox, es la mejor solución para frenar los signos de la edad. Y las advertencias parecen haber dado resultado, porque según un estudio de la Sociedad Española de Medicina Estética, la edad media de acceso a estos tratamientos en España ha pasado de los 35 a los 20 años en 2021.
A este tratamiento ‘preventivo’ se le conoce como baby botox y consiste en la inyección de toxina botulínica, que, a diferencia de la aplicación normal del bótox, no tiene como objetivo la relajación del músculo, sino la debilitación del mismo para suavizar su aspecto. Se utiliza sobre todo en ojos, frente, mejillas y labios, y sus efectos no duran más de cuatro o seis meses. Aquí está la primera trampa porque, si los efectos son temporales, ¿cómo van a prevenir las arrugas en el futuro?
El uso del bótox empieza en Instagram
"El uso de redes sociales, la posibilidad de usar filtros y la aparición de aplicaciones que permiten cambiar las formas del rostro han contribuido a generar nuevas necesidades en pacientes jóvenes", reconoce Sergio Fernández, vicepresidente segundo de SEME.
De hecho, un 40% de la población española ha utilizado los servicios de la medicina estética en alguna ocasión, y no es ninguna sorpresa que las más afectadas por esta presión social sean las mujeres (71,8% frente al 28,2% de hombres).
Uno de los grandes responsables, según las propias adolescentes, es Instagram. En un estudio interno de Facebook, el 30% de las jóvenes encuestadas reconocían que cuando se sentían mal con su cuerpo, Instagram les hacía sentir peor y encontraban en la medicina estética la solución para mejorar su autoestima.
¿Por qué ha aumentado la cirugía estética en jóvenes?
Ante la creciente demanda de estos procedimientos, algunos países han tomado medidas. Es el caso de Inglaterra, que prohibió en el año 2021 los tratamientos estéticos con bótox y rellenos dérmicos inyectables en menores de 18 años. “Ningún niño necesita procedimientos cosméticos a menos que sea por razones médicas. Todavía no han completado su desarrollo físico y mental”, señaló Dorries, la entonces Secretaria de Estado de Cultura, Medios de Comunicación y Deportes.
En España, sin embargo, no existe regulación al respecto más allá de las fichas técnicas de los productos, en las que, según Petra Vega López, presidenta de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME), “los tres tipos de toxinas botulínicas utilizadas en el país indican que no es recomendable para menores de 18 años”.
Intrusismo y peligros de la Medicina Estética
No obstante, la ‘Ley Sara’, aprobada por el Congreso en el año 2021, supuso un primer paso en la regulación de la cirugía estética. Esta No Ley, cuyo nombre hace honor a Sara Gómez, la mujer de 39 años fallecida tras realizarse una lipoescultura a manos de un cirujano que estaba muy lejos de serlo, pretende combatir el intrusismo en la profesión.
Lo que más preocupa a los expertos es el que llega desde internet. Personas que difunden tratamientos con precios muy bajos a través de redes sociales y los efectúan en habitaciones de hotel, domicilios o incluso lavabos de bares. “Este último es el peor, porque no se respeta absolutamente nada y, además, es difícil cuantificar y ubicarles, porque aparecen en redes”, advierte Vega.
Además, defiende que es necesario educar a la población y combatir la publicidad sanitaria para proteger a los más jóvenes. “Lo que tenemos que hacer es advertir de las consecuencias de estos tratamientos, sobre todo si no se realizan correctamente”.
Eso sí, muchos profesionales creen que la Ley se queda corta. Para ellos es necesario que se regule también la obligatoriedad de tener un máster y un diploma de acreditación para ejercer la Medicina Estética. “El problema que vemos es que hay 19 universidades con másteres en Medicina Estética y no todos cumplen el requisito formativo”, señala Vega.
Efectos secundarios y abuso del bótox
Uno de los grandes peligros de que se anuncien estos tratamientos en redes sociales es que no muestran los efectos adversos y la repercusión de hacerlos a edades tan tempranas.
Algunos de estos efectos, que aparecen entre las 12 y las 24 horas después del pinchazo, y pueden durar hasta 6 meses, son: cefaleas, náuseas, rigidez facial, inflamación en la zona, parálisis y caída de párpados. Otro efecto muy común es la sensación de tensión en el entrecejo.
Referencias
Crece el interés y el uso de la Medicina Estética en España. Sociedad Española de Medicina Estética. Consultado online en: https://www.seme.org/comunicacion/notas-de-prensa/crece-el-interes-y-el-uso-de-la-medicina-estetica-en-espana-en-2021-se-realizaron-cerca-de-900.000-tratamientos-medico-esteticos el 27 de junio de 2023.
Botox. Redacción Médica. Consultado online en: https://www.redaccionmedica.com/recursos-salud/diccionario-enfermedades/botox el 27 de junio de 2023
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