Estos son los principales peligros de las infecciones de orina en ancianos

Según la OCU, son tres los colectivos que más accidentes sufren: los niños menores de cinco años, los ancianos mayores de 65 años y las personas empleadas en las tareas del hogar, donde la mayoría son mujeres mayores de 45 años.
La infección de orina en ancianos puede tener serias complicaciones.
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Según la OCU, son tres los colectivos que más accidentes sufren: los niños menores de cinco años, los ancianos mayores de 65 años y las personas empleadas en las tareas del hogar, donde la mayoría son mujeres mayores de 45 años.

Las personas mayores son uno de los colectivos más vulnerables de la sociedad en muchos aspectos. La calidad de vida de las personas se ve notablemente reducida cuando llegan a una determinada edad a causa del paso del tiempo y el deterioro que este conlleva, así como de distintas enfermedades. Una de ellas, sin ir más lejos, es la infección de orina, cuya prevalencia aumenta con la edad, puesto que el envejecimiento produce una alteración de los mecanismos de defensa frente a la misma.

Si bien es cierto que se trata de una afección que en personas jóvenes no tiene por qué presentar grandes complicaciones y se soluciona con un tratamiento de antibióticos o, en algunos casos, con la ingesta de arándanos, en ancianos la situación es más problemática. La infección urinaria en la población anciana puede desencadenar otras patologías y, en el peor de los casos, una septicemia que acabe con la vida. 

Causas de las infecciones de orina en ancianos

"La infección del tracto urinario es el proceso infeccioso más prevalente en ancianos institucionalizados, alcanzando unas cifras de prevalencia comprendidas entre el 20 y el 50% (...) En residencias se han descrito como factores de riesgo para las infecciones urinarias los siguientes: accidentes cerebrovasculares previos, deterioro mental y funcional, sondaje vesical y tratamiento antibiótico previo", explica la doctora Gómez Ayala en un artículo de la revista Farmacia Profesional.

La infección de orina es más habitual en ancianos porque el envejecimiento implica la debilitación del sistema inmunitario y su acción contra la enfermedad, pero también por la acumulación de bacterias. Según explican desde los centros sociosanitarios Los Nogales, "los músculos de la vejiga se aflojan y cuando el adulto mayor va a orinar, esta no llega a vaciarse completamente, quedando orina residual que contribuye al crecimiento de estas bacterias". 

Aparición repentina de incontinencia

Uno de los síntomas más habituales de la infección urinaria en ancianos es la incontinencia. A esto se suma, una fuerte necesidad de orinar que no desaparece, una sensación de ardor al orinar, orinar frecuentemente en pequeñas cantidades, orina de aspecto turbio u oscura y con fuerte olor y, en el caso de las mujeres, dolor pélvico y alrededor del hueso púbico. 

Síndrome confusional agudo 

Mujer con demencia
Imagen de una mujer con demencia.
Pexels. 

"El síndrome confusional agudo es un cuadro clínico que se caracteriza por un cambio agudo y fluctuante en el estado mental, con desatención y niveles de conciencia alterados por un periodo menor de 3 meses, aunque puede prolongarse más tiempo. Su duración es variable, desde pocas horas hasta semanas o pocos meses", cuentan en un artículo de la revista Medisan. Uno de los desencadenantes de esta confusión puede ser, precisamente, una infección de orina, por lo que conviene llevar a cabo un tratamiento precoz de la enfermedad y evitar sondaje vesical.

Pérdida de apetito o pérdida de autonomía

Las molestias ocasionadas por la infección de orina pueden derivar en una pérdida de apetito y/o de autonomía. La pérdida del apetito es frecuente en la pielonefritis (infección que ha subido a los riñones). Así como la fiebre, náuseas y vómitos que suelen surgir en un estado de la enfermedad más avanzado junto al dolor lumbar y la postración.

Sepsis urinaria o septicimia 

La septicemia es causada por la respuesta abrumadora y potencialmente mortal del cuerpo a una infección. Es una complicación de una infección que se produce por una respuesta inmunitaria generalizada que llega a dañar los propios tejidos. Normalmente, es el resultado de la propagación de la infección por todo el cuerpo a través del torrente sanguíneo, aunque no siempre es así. En el caso de derivar de una infección urinaria, es posible que el riñón deje poco a poco de funcionar, por lo que conviene atajar este problema cuanto antes mediante distintos fármacos

Medidas preventivas para la infección de orina

Antes de que un anciano llegue a experimentar algunos de los peligros que puede producir una infección de orina, lo ideal es mantener ciertos hábitos de prevención, como cuentan desde Los Nogales

  • Mucha hidratación. 
  • Alimentación equilibrada rica en fibra para evitar el estreñimiento.
  • Fomentar la movilidad, los cambios de postura y el ejercicio moderado.
  • Mantener una higiene diaria, prestando atención a la zona genital.

Referencias

Ayala, G. A. (2009, 1 julio). Infección urinaria en el anciano | Farmacia Profesional. Consultado en https://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-infeccion-urinaria-el-anciano-13139887 el 24 de febrero de 2023.

SEGG. (2013, 1 febrero). Arándano, escudo frente a las infecciones. Consultado en https://www.segg.es/ciudadania/2013/02/01/arandano-escudo-frente-a-las-infecciones el el 24 de febrero de 2023.

Pérez Pérez, Yanay, Turro Mesa, Lucía Nivia, Mesa Valiente, Rita, & Turro Caró, Eloy. (2018). Peculiaridades del síndrome confusional agudo en el anciano. MEDISAN, 22(5), 543-550. Recuperado en  http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1029-30192018000500012&lng=es&tlng=es el 24 de febrero de 2023.

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