Los tres efectos negativos más frecuentes del FOMO en menores: cuando el miedo a perderse se ceba con la salud mental

Siete horas es la media que los jóvenes españoles pasan conectados a las redes sociales cada semana. El 91% de los menores entre 11 y 18 años tiene y usa alguna. Obsesionarse con estar al corriente de todo lo que sucede en ellas puede acarrear a los jóvenes graves consecuencias mentales.
Según una encuesta elaborada por el Pew Research Center, el 89% de los adolescentes confirman que están en línea “casi constantemente” o “varias veces al día”.
Según una encuesta elaborada por el Pew Research Center, el 89% de los adolescentes confirman que están en línea “casi constantemente” o “varias veces al día”.
PIXABAY
Según una encuesta elaborada por el Pew Research Center, el 89% de los adolescentes confirman que están en línea “casi constantemente” o “varias veces al día”.

Casi siete horas. Esa es la media que los jóvenes españoles pasan conectados a las redes sociales cada semana. Son datos extraídos del último estudio De Alpha a Zeta, educando a las generaciones digitales elaborado por Qustodio, plataforma experta en seguridad, bienestar digital para familias y control parental.

No es el único dato relevante, según informe Digital 2022 España, elaborado por Hootsuite y We Are Social, el número de usuarios de las redes sociales ha aumentado un 10% con respecto a 2021. Además, el 91% de los menores entre 11 y 18 años tiene alguna red social, según un estudio realizado por Doxa Comunicación.

Con toda esta información sobre la mesa no es extraño que los expertos ya alerten sobre los peligros de uno de los fenómenos más característicos de la ‘era de la redes sociales: el FOMO. Acrónimo del inglés ‘fear of missing out’, en español ‘miedo a perderse algo’, el FOMO produce un sentimiento de ansiedad que se manifiesta cuando la persona no está conectada a las aplicaciones y, por extensión, no puede enterarse de lo que sucede en las redes sociales.

“Las redes sociales funcionan las 24 horas del día, por lo que, resulta imposible estar al corriente de todo lo que sucede en ellas. Todo va pasando a gran velocidad y, en muchos casos, cuando se accede ya no hay rastro de lo publicado. Por ello, muchos jóvenes pueden sentir que, al no conseguir ver o enterarse de lo que ha pasado, se queden excluidos socialmente”, explican los especialistas de Qustodio.

Cuando la influencia de estas plataformas resulta excesiva, puede llegar a tener efectos negativos de gran importancia sobre la salud mental de los menores. Estos son los tres peligros más relevantes que destacan los expertos:

Falta de concentración

“Estar constantemente pensando en lo que uno se está perdiendo por no estar conectado, influye en la concentración a la hora de llevar a cabo cualquier tarea. Ello puede afectar de manera negativa en diferentes ámbitos como pueden ser los estudios”, explican.

Baja autoestima

“Estar constantemente viendo lo que hace el resto o experiencias que no están al alcance de cualquiera, puede también afectar negativamente”. Para los expertos, la autoestima puede verse afectada si uno está comparándose con los demás de manera continua.

Trastorno del sueño

“La sensación de estar perdiéndose experiencias puede afectar a la hora de dormir si no se tiene el móvil cerca para poder ver las notificaciones o los mensajes lo antes posible”. También, influye en las horas de sueño si en vez de estar una hora conectado, se está tres.

Eduardo Cruz, CEO de Qustodio, concluye que “el móvil forma parte de nuestra vida, la preocupación que experimentamos todos si no lo tenemos, es algo común. Sin embargo, si de esa preocupación, se pasa a una ansiedad extrema, puede surgir un problema importante. Las nuevas generaciones de jóvenes dedican gran tiempo a su vida online, pero no hay que olvidar que es importante que hagan un uso moderado de la tecnología para que no acabe volviéndose en su contra”. 

¿Quieres recibir los mejores contenidos para cuidar tu salud y sentirte bien? Apúntate a nuestra nueva newsletter.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento