CARMELO ENCINAS. PERIODISTA
OPINIÓN

La luz oscura

Carmelo Encinas, colaborador de 20minutos.
Carmelo Encinas, colaborador de 20minutos.
JORGE PARÍS
Carmelo Encinas, colaborador de 20minutos.

Sigo sin entender el recibo de la luz. Hay partes que comprendo sin mayor dificultad pero otras me resultan tan enmarañadas que he renunciado a entenderlas. La de la energía es una de las partidas más onerosas en los gastos corrientes de una casa y ese alto grado de encriptación de la factura obliga a los medios de comunicación a tener siempre a mano un especialista en descifrar las distintas partidas para que cuando surge el tema explique, con la ayuda de una pizarra, los conceptos por los que pagamos.

Por más pedagógicos que intentan ser, la inmensa mayoría de los ciudadanos no acaban de tenerlo claro. Muchos se malician que lo han complicado deliberadamente para que nos puedan colar los goles que quieran sin que tengamos capacidad de respuesta. Se aprovechan de que nadie está dispuesto a hacer un cursillo para desentrañar los secretos de la factura. En esa ceremonia de oscuridad se mueve ese mercado paralelo tremendamente agresivo que es el de las comercializadoras. Son compañías que realizan la facturación y que tienen un cierto margen de maniobra para ofertar al consumidor determinadas condiciones.

Hace un par meses, un agente debidamente acreditado de una de estas empresas, llamada AUDAX, se acercó a mi domicilio para preguntarme si estaba conforme con lo que pagaba por la luz. Creo que no hay un solo español –le dije- que esté de acuerdo con lo que paga, nuestra energía es una de las más cara de Europa. Aquel tipo amable y diligente me pidió que le mostrara mi último recibo sobre el que punto por punto fue relatándome todo los excesos que la comercializadora rival que entonces me facturaba estaba incurriendo para engordar la cuenta. El agente dijo estar en condiciones de ofertarme una reducción del monto de mi factura, me dio su teléfono por si tenía alguna duda y acepté el cambio de comercializadora para probar suerte. Craso error, a las tres semanas me llegó a casa un recibo en el que me cobraban por solo quince días lo que antes pagaba en un mes.

Llamé de inmediato a aquel agente y después de comunicar con su central me devolvió la llamada para pedirme disculpas y sugerirme que, de inmediato, cambiara de nuevo de comercializadora por que la suya era un desastre. Lo hice, pero en el tiempo de trámite apareció otro recibo de quince días aún más abultado. Ahí no terminó la sangría, poco tiempo después un tercer recibo me exigía el pago de 62 euros por cancelar el contrato antes de tiempo. Media hora de espera en el teléfono de atención al cliente tuvo como recompensa el que un empleado muy respetuoso admitiera que la contratación, según él mismo calificó, había sido fraudulenta. Logré que anularan la sanción pero el sobrecoste de las dos facturas lo di por perdido. El tiempo y la paciencia que la reclamación requiere, vale más. Creo que de eso se aprovechan. Esta fue mi experiencia, si les sirve para conjurar cualquier maniobra oscura en la que no hallarían amparo alguno, no la daré por perdida.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento