El consumo de vino en España descendió un 2,5% en 2010, mientras que las exportaciones aumentaron un 10,6%, según el director general del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV), Rafael del Rey, quien además ha destacado que "tras el año de crisis", las tendencias retoman su dirección, aunque "se amplía la diferencia entre el mercado interior y las exportaciones".

En este sentido, Del Rey ha indicado que "desde hace seis campañas se vende fuera más de lo que se consume dentro", ya que se han comercializado en el exterior 1.766,3 millones de litros, frente a 736,6 millones de litros vendidos en España.

Los caldos que más se han exportado en 2010 han sido los vinos a granel, los vinos envasados sin denominación de origen y los vinos de aguja, con un aumento en volumen del 11,5%, 57,9% y 360,2%, respectivamente.

Por países, Estados Unidos, Francia y Alemania han sido los países donde más han aumentado las ventas en valor, un 14%, 7,2% y 5,6% cada uno; mientras que en volumen, los países que han "recuperado con fuerza las ventas", según Del Rey, han sido China, un 368,6%, Italia (+54,4%) y Rusia (+37,4%).

En España, Del Rey ha destacado la "mala" situación del consumo de vino en la restauración durante 2010, con un descenso en volumen del 9,5% y en valor del 8,3%. En este canal, la "caída pronunciada" se ha dado en espumosos y vinos de mesa con denominación de origen.

En alimentación, el consumo está "menos mal", según Del Rey, ya que el descenso ha sido del 0,8% en volumen y del 4,4% en valor.

En cuanto a los precios, Del Rey ha insistido en que "nadie, salvo España, ha bajado los precios medios en 2010", ya que en las exportaciones ha disminuido un 4,9%, con un precio medio de 1,09 euros por litro.

Asimismo, en el consumo nacional el precio ha descendido un 2%, hasta los 3,05 euros por litro de media.

De cara a 2011, el presidente del OEMV cree que hay razones para el optimismo, ya que "la internacionalización del negocio vitivinícola va a ir dando sus frutos", y además hay que añadir una "mayor profesionalización" del sector y un "mejor conocimiento" de los mercados y los clientes finales.

No obstante, Del Rey considera que el futuro aunque "bueno", va a ser "duro", por lo que de cara al comercio exterior recomienda "apostar por marcas de prestigio" y "mejorar la eficiencia" de las empresas.