El magistrado del juzgado de instrucción número 4 de lleida ha imputado al alcalde de Los Borges Blanques (Lleida), Miguel Ángel Estradé, y a la regidora de fiestas de la localidad, Gemma Farré, por la muerte accidental de una menor en la fiesta de fin de año de 2008.

El juez solicita la comparecencia del alcalde y la regidora para que declaren por un supuesto delito de homicidio imprudente el próximo 6 de abril.

El magistrado ha aceptado la petición de imputación de La Federación Catalana de Asociaciones de Actividades Recreativas Musicales (Fecasarm) y de la familia de la chica de 15 años que murió en Nochevieja de 2008 en la fiesta organizada por el Ayuntamiento, por su condición de máximos responsables de la celebración.

La Fecarsarm considera que en las diligencias practicadas hasta el momento, queda acreditado que Estradé y Farré no adoptaron —ni se preocuparon de que se adoptaran— las medidas de seguridad obligatorias que "podrían haber evitado el trágico suceso".

Aseguran que tanto el alcalde como la concejal reconocieron que la actividad "no contaba con la oportuna licencia y ni con la vigilancia privada obligatoria" y que no pasó "ningún tipo de control de seguridad previo a su celebración".

Han afirmado que las diligencias han puesto de manifiesto "el altísimo grado de previsibilidad que existía de que se produjera el suceso".

La joven murió durante la celebración de la verbena de Nochevieja en el polideportivo municipal de Les Borges Blanques (Lleida) cuando cayó de espaldas accidentalmente desde una barandilla y se golpeó fuertemente la cabeza.

La joven, Montserrat J., estaba con unos amigos en la fiesta que organiza el Consistorio con una orquesta cuando sobre las 3.30 horas se desequilibró y cayó desde una barandilla situada a unos tres metros de altura de la pista.

Inmediatamente fue trasladada al Hospital Arnau de Vilanova de Lleida, pero las graves heridas obligaron a trasladarla al Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, donde finalmente murió.