La formación belga Graindelavoix, que este jueves 17 de marzo interpretará la 'Missa Caput' de Johannes Ockeghem en el Centro Cultural Santa Clara a las 20,30 horas, ha atendido este miércoles a los medios de comunicación en este enclave para presentar su programa y compartir con ellos su peculiar forma de entender la música polifónica.

Su director y fundador, Björn Schmelzer, ha definido a la formación como un colectivo artístico más que como un grupo de música al uso. "Me gusta fomentar las capacidades individuales de cada artista para que nuestra música sea lo más personal posible", explica, "todos tenemos diferentes caracteres, somos de países distintos y hemos educado nuestra voz de forma totalmente diferente, pero tratamos de complementarnos", y ahí es donde radica la grandeza de este colectivo, se ha indicado en nota de prensa.

Al respecto, Albert Riera, una de las voces españolas de la formación, añade que "no se busca el empaste de las voces, sino que cada uno canta a su manera y las distintas aportaciones son lo que proporcionan la riqueza a este grupo". De hecho, Schmelzer cuenta que le gusta llevar a sus cantantes al extremo para así sacar lo mejor de ellos.

Así, el concierto que ofrecerán este jueves se enmarca en el leit motiv de la presente edición del Festival de Música Antigua de Sevilla, 'Manierismos y extremos musicales', y está muy relacionado con esa libertad que tienen los intérpretes de Graindelavoix, ya que "la partitura es sólo una base" a raíz de la cual "las voces se alargan como lo hacían las extremidades de las obras manieristas pictóricas", explica el director de este colectivo artístico.

Schmelzer, además, combina su trabajo de interpretación y dirección con sus estudios de antropología y etnomusicología y, es ese modo de entender la música, desde un punto de vista social e histórico el que traslada a Graindelavoix. "La música forma parte de la sociedad —afirma—, está en la vida real de la gente y conecta con las personas".

Asimismo, Schmelzer cuenta que su elección del programa para la noche de este jueves, la 'Missa Caput' de Johannes Ockeghem, tiene un significado especial para ellos, ya que formó parte de su primer trabajo editado. Además, está muy relacionada con la famosa leyenda de San Jorge y el dragón, que sirvió de inspiración para la composición de este canto y que sirve de lazo de unión entre la tradición flamenca y la española.

De este modo, el director belga no sólo demuestra ser un gran conocedor de la cultura europea, sino que además posee un envidiable interés por el estudio de los nexos que unen a los países tan diversos que componen nuestro continente y cómo ello se refleja en la historia de las músicas antiguas, e incluso en el propio carácter internacional de la formación: Bélgica, Estonia, Alemania o España son sólo algunos de los países de procedencia de los componentes de este grupo.

Origen de su nombre

Graindelavoix debe su nombre a un ensayo de Roland Barthes en el que el francés reflexionaba acerca de la esencia de la voz, el "grano de la voz", fundamento principal también del trabajo de investigación y experimentación de esta formación belga. "La polifonía ha sido tradicionalmente demasiado espiritual y pura", explica Riera, a lo que Schmelzer añade que su música está "más conectada con el cuerpo y las emociones".

En muchos grupos polifónicos, la ornamentación queda absolutamente prohibida. En Graindelavoix, sin embargo, es esa diversidad y esa improvisación la principal característica de sus conciertos, donde tratan de alejarse de la espiritualidad para concentrarse en sus propios cuerpos.

Las entradas para el concierto que Graindelavoix ofrecerá en el festival tienen un precio de 18 euros y pueden adquirirse en las taquillas del Teatro Lope de Vega, en www.generaltickets.com, o en el propio espacio del concierto desde una hora antes.