El Tribunal Supremo ratificó la pena de un año y once meses de prisión por delito de lesiones impuesta a un joven de 23 años, Óscar F.L, natural de Ourense y vecino de Zaldívar (Bizkaia), como autor de un delito de lesiones sobre otro joven, Ignacio F.V, al que durante una discusión registrada el 27 de octubre de 2008 en La Cistérniga apuñaló en el abdomen con una navaja y causó graves lesiones.

El fallo del Alto Tribunal desestimó el recurso de casación interpuesto por el condenado, que había solicitado la absolución por entender que no había quedado acreditada la autoría del navajazo, y confirmó en todos sus términos la condena dictada por la Audiencia de Valladolid, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

Aunque el Ministerio Fiscal y la acusación particular habían solicitado seis y cinco años de cárcel, respectivamente, por delito de tentativa de homicidio y, además, la segunda de ambas acusaciones el internamiento del procesado en un módulo de seguridad psiquiátrico por espacio de siete años y medio, la sentencia absolvió a Óscar F.L. de dicho delito y le condenó únicamente por lesiones y le aplicó la eximente incompleta derivada de la esquizofrenia paranoide que padece y del abuso de tóxicos.

El fallo, que no considera "suficientemente acreditado que la intención del procesado fuera la de matar a su víctima y sí la de herirle con el arma blanca utilizada", incluye, amén de los casi dos años de privación de libertad impuestos, otros cinco años de internamiento en un centro psiquiátrico adecuado al tipo de alteración que padece, así como la prohibición de aproximarse a su víctima a menos de 500 metros por espacio de cinco años y, en concepto de responsabilidad civil, el pago de una indemnización de 7.919,65 euros en favor del lesionado.

Los hechos se remontan a la madrugada del día 27 de octubre de 2008, fecha en la que se celebraba una fiesta privada de cumpleaños en el Club Alci, sito en La Cistérniga. Allí se encontraban el lesionado, José Ignacio F.V, y su novia, Bárbara A.G, cuando el ahora condenado, Óscar F.L, entró en el local dirigiéndose a los presentes, a los que no conocía de nada, en términos de "¿dónde se esconden esos maricones?".

La víctima se hallaba en la barra dando palmas y siguiendo la música, lo que molestó a su agresor, que comenzó a soltar incoherencias y le preguntó "¿dónde está el cielo, cómo se va al cielo?", tras lo cual se inició entre ambos un forcejeo durante el cual Óscar F.L, tal y como quedó acreditado en el juicio, sacó una navaja con la que acometió a José Ignacio F.V. a la altura del abdomen y le sacó todo el paquete intestinal.

Fotos con el teléfono móvil.

Acto seguido, el agresor salió del local y, antes de abandonar el lugar a bordo de su coche y en compañía de su novia y un amigo, siguió por allí realizando fotos con su teléfono móvil.

Fue la novia del lesionado la que consiguió anotar la matrícula del coche del condenado que más tarde facilitó a la Guardia Civil y lo que, a la postre, permitió la detención del autor de la agresión.

A causa del navajazo, el herido, que sufrió la salida del paquete intestinal, tuvo que ser intervenido quirúrgicamente y tardó en curar cincuenta días, tras lo cual le quedaron como secuelas distintas cicatrices.