Un ciudadano de nacionalidad marroquí será juzgado este miércoles en la Sala de lo Penal número 2 de Oviedo, acusado de un delito contra los derechos de los trabajadores por engañar a un compatriota con una oferta de trabajo que no se ajustaba a la realidad.
Según el escrito de acusación del Ministerio Público, el acusado conocía que un ciudadano español ofrecía 300 euros, residencia y manutención a quien le atendiera la casa, realizara las labores del hogar y cumpliera con sus requerimientos sexuales "como si fuera su esposa".
En acusado contactó en Marruecos con una compatriota a quien ofreció la posibilidad de conseguirle permiso de trabajo y residencia en España, como conductora del vehículo de un ciudadano minusválido a cambio de 1.500 euros mensuales, además de residencia y manutención.
Tras el pago de un adelanto para tramitar la documentación, la mujer viajó a España donde se encontró con que la función que debía realizar no era la prometida y que el sueldo era de 300 euros, por lo que al cabo de un mes abandonó el puesto.
De acuerdo a la Fiscalía, la mujer no accedió en ningún momento a los requerimientos sexuales del hombre y trabajó dada de alta en la seguridad social.
El imputado, sin antecedentes penales, se enfrenta a tres años de prisión y multa de nueve meses con cuota de doce euros diarios. Además, indemnizará a la mujer con 902 euros, por los perjuicios.
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