El ictus es la primera causa de muerte de la mujer y la segunda en el hombre, con tasas por encima de 50 y cerca de 60 por cada 100.000 habitantes respectivamente en la Comunitat Valenciana y el tiempo de respuesta en la aplicación del tratamiento es fundamental no sólo para disminuir esta tasa de mortalidad sino para evitar los daños cerebrales y las secuelas que puede generar. Por ello, nunca debe ir más allá de las cuatro horas y media.

Con estos datos, la Conselleria de Sanidad ha elaborado un Plan de Atención en la Comunidad Valenciana 20011-2015que organiza los dispositivos asistenciales que reducen la mortalidad y que ha presentado este viernes el secretario autonómico de la conselleria de Sanitat, Luis Rosado.

El Plan organiza los dispositivos asistenciales necesarios (Atención Primaria, CICU, servicios de emergencias y urgencias hospitalarias, Unidades y Equipos de Ictus, Servicios de Rehabilitación y Unidades de daño cerebral sobrevenido) para garantizar que los ciudadanos de la Comunitat dispongan de todos los recursos que han demostrado disminuir la mortalidad y mejorar la calidad de vida en los pacientes que sufren un ictus.

El ictus es una de las enfermedades neurológicas más prevalentes y la principal causa de discapacidad en el adulto. A nivel nacional, las tasas de incidencia son de 218 en varones y 127 en mujeres por 100.000 habitantes. Así, de las 11.500 camas de hospitales públicos de la Comunitat Valenciana para agudos al día 256 se ocupan con estos enfermos.

En la Comunitat, las tasas de mortalidad por enfermedades cerebrovasculares han mostrado una clara tendencia a la disminución tanto en el sexo masculino como en el femenino, pero aún así, la enfermedad cerebrovascular es la primera causa de muerte de la mujer y la segunda en el hombre, con tasas por encima de 50 y cerca de 60 por cada cien mil habitantes respectivamente. Esta reducción de la mortalidad se debe a los avances en la atención clínica y los progresos en el diagnóstico y control de los factores de riesgo.

Al respecto, Rosado ha explicado que para dar "una asistencia urgente y con equidad para todos los ciudadanos, se necesita un sistema organizado, una red asistencial direccional, para que independientemente del lugar en que sobrevenga el ictus, se alerten los niveles asistenciales responsables de la asistencia a cada paciente". De este modo, la cadena asistencial paciente-emergencias-hospital se pone en marcha con la activación del Código Ictus.

El Código Ictus es un protocolo que permite la rápida identificación, notificación y traslado de los pacientes con ictus a los Servicios de urgencias de los hospitales: reduce el tiempo de llegada al hospital, incrementa el número de pacientes que pueden beneficiarse del diagnóstico y tratamiento precoz y tiene unos determinados criterios de activación: edad paciente, tiempo desde el inicio de la sintomatología etc.

Unidades de ictus en la comunitat

Las Unidades de Ictus son unidades de cuidados intermedios específicas para el tratamiento de la fase aguda del ictus, ubicada en los Servicios de Neurología, de quien dependen orgánicamente, aunque tienen carácter multidisciplinar.

Estas unidades optimizan las estrategias diagnósticas, dan tratamiento específico adaptado a subtipos de ictus, protocolizan la situación clínica para prevenir complicaciones o minimizarlas e inician precozmente la rehabilitación del paciente.

Actualmente en la Comunitat existen seis unidades de Ictus (Hospital General de Castellón, Hospital General de Valencia, la Fe, Hospital General de Alicante y en breve se pondrán en marcha la del Hospital Clínico de Valencia y el General de Elche).

Para la elaboración de este Plan se han contemplado los Planes de Salud de la Comunitat, fundamentalmente el III Plan de Salud de la Comunidad Valenciana 2010-2013 recientemente presentado; la Estrategia del Ictus del SNS, el Protocolo de consenso para la atención al ictus en fase aguda en la Comunitat; el Plan de Asistencia Sanitaria al Ictus-Comunidad Valenciana (PASI-CV), propuesto por la Sociedad Valenciana de Neurología y las recomendaciones de la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física en la Rehabilitación del Ictus.