El Justicia de Aragón, Fernando García Vicente, a raíz de las quejas recibidas de los vecinos del barrio de María Auxiliadora de Huesca, ha pedido al Ayuntamiento de esa ciudad mayor control del ruido en los espectáculos que se celebran al aire libre.

El Justicia ha hecho esta petición después de que vecinos del barrio de María Auxiliadora se dirigieran a él por las molestias que les ocasionó la carpa al aire libre instalada en mayo de 2010, durante las fiestas del barrio, en el polígono Puerta del Pirineo. En la queja, criticaban la proximidad de la carpa a las viviendas y las molestias ocasionadas por el ruido.

El Justicia de Aragón ha señalado la ausencia de respuesta por parte del Ayuntamiento de Huesca a las solicitudes realizadas en materia de ruido en la ciudad.

Así, por tercera vez, la oficina del Justicia ha remitido una petición de información al consistorio relativa a las molestias ocasionadas en algunos vecinos como consecuencia del ruido de los espectáculos que, con motivo de diferentes festividades, se celebran al aire libre en los barrios de la ciudad y, por el momento, sigue sin recibir respuesta.

García Vicente ha estimado que el Consistorio, a veces, no sabe como actuar, pero ha recordado que su solicitud propone, únicamente, instalar un limitador de sonido en los aparatos reproductores y ha incidido en que la ley hay que cumplirla.

Al respecto, el Justicia ha opinado que el Ayuntamiento de Huesca "deberían haber contestado", a pesar de que, "a veces, no sabe qué hacer porque ve que es algo puntual".

No obstante, "la ley hay que cumplirla y si dice que los ruidos deben tener un límite determinado, aunque se pueda ser más o menos tolerante, habrá que tomar alguna medida, porque los derechos hay que respetarlos", ha apuntado.

Gira por aragón

El Justicia de Aragón está visitando varias ciudades aragonesas dentro de su trabajo de recoger las quejas de los ciudadanos. En la provincia de Huesca, ha visitado, por ahora, Jaca y Barbastro, donde ha atendido a cerca de cuarenta personas.

Las quejas, en general suelen ser comunes entre las distintas zonas y las más numerosas se refieren a la poca atención que la administración presta a los ciudadanos cuando se acercan a realizar alguna gestión. También son habituales quejas en cuestiones relativas al acceso a un empleo público o a la sanidad.

El ruido es uno de los problemas que más preocupa a los ciudadanos y ha pasado de ser un problema urbano a estar presente en los pueblos, donde las peñas comienzan a funcionar cada fin de semana sin que exista una normativa que las regule.

En este sentido, el Justicia ha comentado que, "en muchos pueblos, las peñas antes sólo funcionaban durante las fiestas y ahora lo hacen todos los fines de semana", de forma que, "además del ruido, nos encontramos con otros problemas, como la ausencia de controles de bebidas alcohólicas o menores y de higiene y seguridad".

Para evitar estas situaciones, el Justicia ha elaborado un modelo de normativa para que los pueblos más pequeños tengan un punto de referencia para poder actuar.