La cárcel de Segovia acoge el rodaje de 'El precio de la libertad', sobre la vida del político vasco Mario Onaindía

Las instalaciones de la vieja cárcel de Segovia acogen estos días el rodaje de la serie de televisión 'El precio de la libertad', que narra la vida del histórico político vasco Mario Onaindía, que fue condenado a muerte por el franquismo en 1970 en el denominado 'Proceso de Burgos' y presidente del PSE-EE de Álava hasta su muerte, en 2003.

Las instalaciones de la vieja cárcel de Segovia acogen estos días el rodaje de la serie de televisión 'El precio de la libertad', que narra la vida del histórico político vasco Mario Onaindía, que fue condenado a muerte por el franquismo en 1970 en el denominado 'Proceso de Burgos' y presidente del PSE-EE de Álava hasta su muerte, en 2003.

La miniserie, dirigida por Ana Murugarren y producida por Joaquín Trincado (Blogmedia), será presentada en el Festival de Cine de San Sebastián y posteriormente, en el mes de octubre, se emitirá a través de Euskal Telebista y Televisión Española (TVE).

Quim Gutiérrez, Andrés Herrera, e Iñaki Rikarte son los actores principales de esta nueva producción. Junto a ellos estarán también Álex Angulo, Mikel Losada, Paco Sagarzazu, Leyre Berrocal, Javier Krahe, Chete Lera, Jacobo Dicenta, Xavi Boada, Patxo Telleria y Ramón Barea.

La miniserie, que contará con dos capítulos de 160 minutos de duración cada uno, abarcará desde los inicios de los años 60 hasta los 80.

En la primera parte, el espectador será testigo del ingreso de Mario Onanindía en la primera ETA hasta que es condenado en el Proceso de Burgos. La segunda entrega mostrará desde que es exiliado a Bélgica hasta que toma la decisión de convencer a los polimilis para dejar las armas.

Siete semanas

En conferencia de prensa, en la vieja cárcel de Segovia, y en presencia del alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, el productor, Joaquín Trincado, la directora y varios de los actores protagonistas, ofrecieron algunos detalles de la serie, que se encuentra en sus últimos días de rodaje, tras un trabajo de siete semanas de filmación en escenarios del País Vasco y Burgos.

Trincado valoró el decorado que ofrecen las instalaciones de la antigua cárcel de Segovia, desocupada hace una década, y que es escenario de frecuentes rodajes, como por ejemplo de la última obra de Santiago Segura, "Torrente IV", que hoy se preestrena en Madrid.

'La vieja cárcel de Segovia tiene una singularidad especial, es de las pocas en España que no está sobreocupada y tiene unas características fantásticas para rodar cine', indicó Trincado, quien pidió al Ayuntamiento de Segovia que valorará el mantenimiento del espacio para acoger rodajes.

El actor Quim Gutiérrez, que interpreta al joven Mario Onaindia, se sumó a esta petición y señaló que para él era un "lujo" trabajar en un "decorado con tanta historia en sus paredes".

"Como actor, siempre es un lujo sentirte acompañado por una especie de halo espiritual de quienes estuvieron aquí, nos ayuda a meternos en los papeles", indicó. Quim Gutiérrez, que bromeó sobre el frío que ha pasado durante el rodaje en Segovia "y sobre todo en Burgos" expresó su confianza en que la miniserie "esté a la altura de los magníficos decorados en los que hemos rodado".

Por su parte, la directora Ana Murugarren, y tras declararse muy contenta con el trabajo de los actores, explicó que a Mario Onaindia "todos le recuerdan con esas barbas, tipo Bud Spencer" aunque "aquí estamos contando también la vida de ese Mario más joven, en la primera parte, cuando tenía entre los 18 a 22 años, cuando entró en aquella primera ETA que no tiene nada que ver con lo que es ahora, una lucha más revolucionaria contra el franquismo".

Murugarrem destacó la "energía" de algunos escenarios, como la vieja cárcel de Segovia, o la sala de Burgos donde Onaindía fue procesado y explicó que la segunda parte de la serie es "la más política, después de ser amnistriados, en aquellos años tan revueltos donde había un muerto cada día".

Según la directora, tanto Mario Onaindía, Teo Uriarte o Juan María Bandrés, "fueron tan cabales y tan honestos que proclamaron que con la violencia no se va a ninguna parte y consiguieron que una parte de ETA, los polimilis, dejaran las armas, que es como acaba la película, con la entrega de armas, un hecho ahora muy pertinente, a ver si se repite la historia".

Por su parte Andrés Herrera, que interpreta a Teo Uriarte, indicó que le había resultado "muy enriquecedor, como actor y como persona, descubrir en profundidad una historia que no por cercana era desconocida para mí".

Herrera indicó que la viuda de Mario Onaindía y el propio Teo Uriarte "dieron el visto bueno al guión y nos han ayudado mucho y desde el máximo respeto y la humildad, ellos han sido el motor para Quim Gutiérrez y para mi".

Según Herrera, "fueron una gente que formaron parte de la historia y la cambiaron, aunque la historia les paso por encima, eran jóvenes que exploraron los limites de la política y que pagaron, una a una, las consecuencias de estar condenados a muerte por el franquismo, a estar condenados a muerte por sus propios amigos, sus propios amigos de lucha y sus errores son nuestro presente".

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