Las ciudades que han sido, son o serán Capitales Europeas de la Cultura así como las que todavía se encuentran en fase de candidatura, entre ellas Burgos y Segovia, han coincidido en el valor de ostentar el título pero han señalado la necesidad de que la Unión Europea (UE) se implique más en el proceso y de que se establezca un filtro a la hora de determinar si una capital puede presentar candidatura.

Estas reivindicaciones fueron trasladadas por sus representantes ayer en Bruselas, durante la reunión organizada por el área de Cultura de la Comisión Europea para tratar el futuro de la Capitalidad ante la exigencia de presentarse en el primer semestre de 2012 una propuesta para garantizar una transición sin problemas desde el actual reglamento que regula esta figura hasta 2019 (recogido en la Decisión 1622/2006/EC), hasta el que se aplique a partir de 2020.

En un comunicado recogido por Europa Press, Segovia 2016 ha informado de que la gran mayoría de los asistentes apoyaron el título y su continuidad, pero solicitaron cambios en la normativa que lo regula.

Entre ellos, figuran la mayor implicación por parte de la UE en el proyecto y la aplicación de un filtro de candidatas que discrimine en función de si las ciudades cuentan ya con una estrategia cultural planteada, si cuentan o tienen la intención de contar con herramientas de participación ciudadana y, en definitiva, si pueden llevar a cabo una Capitalidad con calidad.

Financiación del gobierno español

Las finalistas españolas que estuvieron presentes en la consulta de Bruselas aprovecharon para mantener una reunión informal en la que pusieron en común sus planteamientos económicos con el objetivo de consensuar cuál podría ser la aportación "coherente" por parte del Estado español.

El presupuesto de las candidatas para el año de la Capitalidad se compone generalmente de aportaciones de las administraciones local, regional y central, el sector privado y la UE —a través del Premio Melina Mercouri, de 1,5 millones de euros—.

Mientras el comunitario está fijado y los demás dependen de las autoridades territoriales de cada candidatura y del sector privado, el del Estado es un presupuesto común a todas las candidaturas que aún no está fijado.

La directora gerente de Segovia 2016, Nuria Preciado, acudió a esta reunión con una actitud prudente basada en la creencia de que, en una fase como la actual en el que las ciudades todavía son candidatas, "se puede hablar sólo de aportación coherente del Estado, nunca de una aportación cerrada".

Una vez seleccionada la ciudad española que finalmente ostentará la Capitalidad Europea de la Cultura, Preciado está convencida de que "el Estado la apoyará firmemente, dada la importancia de este título para España en su conjunto".