Muere Rodrigo, el niño vallisoletano que esperaba desde hace casi un año un trasplante multivisceral

Una infección bacteriana contraída en los últimos días hizo empeorar su estado y motivó su traslado a La Paz

El niño vallisoletano Rodrigo, un bebé de casi un año que esperaba un trasplante multivisceral, es decir, de todo el aparato digestivo—duodeno, hígado, intestino grueso y delgado, estómago, páncreas y bazo—, falleció este pasado jueves en Madrid tras contraer una infección bacteriana que empeoró el ya de por sí delicado estado de salud en el que se encontraba.

El pequeño, tal y como ha explicado a Europa Press su desconsolada madre, Judith, cogió una infección "muy grande" este pasado miércoles y fue ingresado inicialmente en el Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid, para más tarde, ante la gravedad de sus estado, ser derivado hasta el Hospital de la Paz, en Madrid, donde murió sobre las 20.00 horas de ayer.

La progenitora, que el pasado domingo había hecho un nuevo llamamiento para lograr un trasplante para Rodrigo, que finalmente no ha llegado a tiempo, ha aprovechado para pedir a la sociedad que se conciencie ante este tipo de situaciones y "no deje que otra persona más fallezca antes de recibir un trasplante".

Al principio, Rodrigo sólo necesitaba un trasplante aislado de intestino delgado pero, al no llegar el órgano en el tiempo que se esperaba, otros órganos se habían ido deteriorando hasta el punto de necesitar un trasplante multivisceral para poder sobrevivir.

Y es que con casi doce meses de vida, un peso de tres kilos y trescientos gramos y tras diez operaciones sin éxito, este bebé llevaba meses a la espera de un trasplante que le permitiera poder continuar con su vida.

Rodrigo nació con una gastrosquisis severa—intestino fuera del abdomen— aunque los médicos aseguraron a Judith que reintroduciendo el intestino en su abdomen el pequeño progresaría adecuadamente. Sin embargo, no fue así.

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