La consejera para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Micaela Navarro, en relación con la polémica suscitada por el servicio de teleasistencia móvil a la mujer asesinada a manos de su ex pareja este pasado martes en la barriada malagueña de El Palo, ha afirmado que, "ni el Ayuntamiento de Málaga, ni el Gobierno, tienen la culpa de nada", pues "culpable del asesinato es exclusivamente quien la mató".

En declaraciones a los periodistas, Navarro, quien ha presentado este viernes en Córdoba una jornada estatal por la igualdad salarial entre mujeres y hombres, ha pedido, en relación con este caso, que se centre la atención "donde tiene que estar, y es que un hecho desgraciado e irreparable, como el que ha pasado en Málaga, no vuelva a suceder ni una vez más".

En este sentido, Navarro ha señalado que todas las administraciones son "responsables de seguir mejorando la coordinación, para que en ningún momento, ni en ningún caso, vuelva a pasar lo que ha ocurrido en Málaga", pues de lo que se trata es de que, "en cada momento se utilicen las medidas más adecuadas y más oportunas", argumentando, en relación con esta última víctima de la violencia de género en Málaga, que no sabe "si el teléfono móvil era la medida complementaria a la orden de alejamiento más oportuna, pues, a lo mejor hubiera sido más oportuno un brazalete electrónico".

Pero no se trata, según ha aclarado la consejera, "de introducir en el debate nuevos elementos", ya que ella no perderá "ni un minuto en intentar buscar culpables, pues no los hay", más allá del propio asesino.

Por eso, Navarro, según ha destacado, nunca caerá en la tentación de "echar balones fuera y residenciar responsabilidades o culpabilidades en función de quien esté gobernando, porque hay muchas mujeres que nos están mirando, que no han puesto nunca una denuncia y que están siendo maltratadas cada día". Ante esas mujeres, según ha recalcado, "todas las administraciones públicas, unas más que otras, evidentemente", tienen la responsabilidad de "garantizarles su seguridad y de que un hecho como el de Málaga no vuelva a ocurrir".