El sindicato UGT Extremadura ha achacado el descenso de la inflación registrado en enero a un periodo de rebajas "más intensivo y acusado" que en años anteriores, y por tanto "no logra disfrazar una evolución creciente de los precios en las que las subidas de impuestos tienen un papel principal".

En cualquier caso, ha señalado que este descenso del IPC en Extremadura "lo es menos que en ejercicios anteriores", y reafirmado su apuesta por "el valor de la negociación colectiva y la necesidad de que se garanticen los salarios de los trabajadores".

De esta forma valora UGT, a través de nota de prensa, los datos del IPC conocidos este martes, que reflejan un descenso de seis décimas en enero en Extremadura con respecto al mes anterior, y la tasa anual alcanza el 3,4 por ciento.

Ante estos datos, el sindicato ha resaltado que la variación interanual del IPC en enero en la región, del 3,4 por ciento, "supone un incremento de este índice de cuatro décimas con respecto al dato registrado en diciembre".

Según señala UGT, el grupo de productos que más ha influido en la reducción del IPC ha sido Vestido y calzado, que han registrado una caída del 14,7 por ciento, más acusada que el año anterior, lo cual refleja "los efectos de unas rebajas de invierno que han sido más intensas que en ejercicios precedentes dada la atonía del consumo".

Le sigue el grupo de Ocio y cultura, con un descenso de 1,2 puntos, generado básicamente por la reducción de los precios del viaje organizado.

Por su parte, destaca el sindicato que los grupos que han tenido una mayor repercusión alcista en la evolución del índice general de precios, han sido Vivienda (+3 por ciento), por el "desmesurado incremento" de los precios de la electricidad (9,8 por ciento) y el gas (4 por ciento); los Transportes, donde los carburantes "siguen escalando posiciones" (+2,2 por ciento), y Bebidas alcohólicas y tabaco, con un incremento similar.

El alza de precios,

Achacable al gobierno

Explica UGT que en todos estos grupos "la subida está ligada con decisiones económicas gubernamentales de subida de impuestos", por lo tanto ha asegurado que "es al Gobierno al que hay que achacarle en gran parte la tendencia del alza de precios".

Ante esta situación, UGT recuerda que "son las rentas del trabajo las que están sufriendo doblemente la crisis", por un lado por los recortes de salarios y pensiones y, por otro, por los "sucesivos incrementos tarifarios y de impuestos indirectos derivados de una política económica rendida a las exigencias de los mercados financieros".

Añade que esta situación de "incremento de precios continuado", junto con un "nulo crecimiento económico y elevadas tasas de desempleo", puede tener efectos económicos y sociales muy desfavorables en nuestro país.

Por todo ello, señala que "dada la dependencia de nuestra economía de la demanda interna", es fundamental "llevar a cabo una política salarial que no sólo mantenga, sino que mejore el poder adquisitivo de los salarios, aspecto imprescindible para la reactivación económica y del consumo, y la consiguiente recuperación del empleo".

Finalmente, el sindicato UGT insiste en la "defensa del modelo salarial pactado en el AENC firmado con la patronal en febrero de 2010 porque permite una acomodación flexible a la evolución económica y se adapta a la realidad de los distintos sectores y empresas". El sindicato denuncia que "los ataques contra las cláusulas de revisión salarial no están ligados con la productividad ni la competitividad sino con la desrregulación y la devaluación salarial".