El presidente de Horeca cree que en el asador "se está actuando de forma prepotente por las dos partes"

El presidente de los hosteleros gaditanos, Horeca, Antonio de María, considera que en las medidas cautelares anunciadas por la Junta contra el asador Guadalmina, en Marbella (Málaga) por incumplir la Ley Antitabaco "se está actuando de forma prepotente por ambas partes, por parte de la Junta y por parte del empresario", y ha apuntado que "con su actitud el Gobierno andaluz está convirtiendo a este empresario en un mártir".

El presidente de los hosteleros gaditanos, Horeca, Antonio de María, considera que en las medidas cautelares anunciadas por la Junta contra el asador Guadalmina, en Marbella (Málaga) por incumplir la Ley Antitabaco "se está actuando de forma prepotente por ambas partes, por parte de la Junta y por parte del empresario", y ha apuntado que "con su actitud el Gobierno andaluz está convirtiendo a este empresario en un mártir".

En declaraciones a Europa Press, De María ha considerado "lamentable" toda esta situación, de manera que "si bien este industrial no ha cumplido como ciudadano y la insumisión no cabe en un empresario, la Administración andaluza está siendo un poco excesiva en el sentido de que los hosteleros no somos delincuentes ni estamos fomentando una actitud contraria a la salud de las personas".

"Van a hacer un mártir de esta persona, y eso no le interesa a nadie ni al sector ni a la administración", ha agregado este dirigente empresarial, que considera que "hay que aguantar el tirón con las medidas tomadas, como el cierre cautelar, que es la única medida que se puede tomar en este caso, eso lo entendemos todos", pero ha advertido de que "hablar de cantidades y multas sin que la Junta haya ido a ver a los abogados de este señor no es bueno para nadie".

A su juicio, "se está actuando de forma prepotente por ambas partes, por parte del empresario y de la Administración y en estos momentos de dificultad, crisis y ruina para estos empresarios, debemos ser conscientes de que vivimos una situación muy sensible y cualquier persona puede perder los papeles".

"Esa situación de crisis hay que tenerla en cuenta y hay que buscar más el diálogo; hace falta más mano izquierda y se debería haber hablado con los abogados de este señor", ha agregado De María, quien aboga por "posturas inteligentes, sin presiones de un lado ni de otro".

Asimismo, considera que este empresario marbellí "ha estado mal asesorado", toda vez que "si hubiera formado parte de una organización empresarial, le hubiéramos asesorado y esa circunstancia ha jugado en contra de este empresario".

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