Agentes de la Policía Nacional adscritos a la Comisaría Provincial de Valladolid lograron desarticular un grupo de delincuentes compuesto por nueve varones, siete de ellos menores, dedicado al robo de dinero y teléfonos móviles mediante la intimidación a sus víctimas.

Los individuos fueron arrestados el día 8 acusados de diez robos con violencia cometidos en el centro de la capital vallisoletana, según informaron a Europa Press fuentes policiales.

La primera denuncia tuvo lugar a mediados del mes de diciembre del año pasado, cuando tres chicas indicaron que cinco chicos les habían salido al paso en la calle Panaderos y, tras hacerles preguntas triviales —como a qué instituto iban—, les intimidaron con darles una paliza si no les entregaban todo lo que portaban encima.

Ante la gravedad de los hechos, el Grupo III de la Comisaría de Delicias, especializado en robos con violencia, se hizo cargo de la investigación de los hechos denunciados y comenzó a realizar gestiones en torno a la zona de comisión de los hechos, aunque sin resultados en ese momento.

Posteriormente, el 5 de enero, nuevamente tres jóvenes denunciaron haber sido víctimas de un robo con violencia cometido por cinco jóvenes en la calle Solanilla. Los jóvenes explicaron que tras ser abordados por los delincuentes, fueron amenazados con agredirles si no les entregaban todo lo que llevasen encima. Los individuos finalmente les sustrajeron el dinero y los teléfonos móviles.

Tras un periodo de inactividad del grupo, los días 29 y 31 de enero, dos y tres personas, respectivamente, denunciaban que habían sido asaltadas por cinco jóvenes que tras intimidarles verbalmente, y en el primero de los casos agredirles físicamente, les habían sustraído el dinero que portaban y los teléfonos móviles en las calles García Lesmes y Panaderos.

De nuevo, los agentes del Grupo III volvieron a hacerse cargo de la investigación y, tras el estudio pormenorizado de cómo ocurrían los hechos, la zona de actuación y las horas, consiguieron en esta ocasión identificar a uno de los autores de los hechos gracias a la colaboración con el Grupo de Menores y mediante un dispositivo dirigido a identificar a todas las personas que se relacionaban con el investigado.

Resultado de la investigación, se pudo averiguar que el grupo solía actuar con un número aproximado de entre cinco y seis, aunque rotaban los miembros en los robos que cometían.

Las detenciones

Tras identificar plenamente a la mayoría de los integrantes, el día 8, en unión de dotaciones del Grupo de Atención al Ciudadano, se procedió a su detención. De esta manera, ese mismo día se procedió al arresto de cinco de ellos: Pablo H.A, nacido en Burgos en 1993; David V.A, nacido en Valladolid en 1991, y tres menores de edad.

En días sucesivos, identificaron a otros cuatro menores que presuntamente habían participado en los hechos denunciados.

De los cinco detenidos, dos ingresaron en el Centro de Menores y el resto fue puesto en libertad tras ser oídos en declaración en dependencias policiales.

La investigación sigue abierta dado que se tiene la certeza de que además de los diez hechos denunciados, este grupo podría haber cometido más delitos de robos con violencia.