El acusado de matar en 2008 a un amigo tras mantener con él dos discusiones ha asegurado este lunes ante el jurado que no recuerda haber apuñalado a P.V.R. ya que había estado consumiendo "una pila de droga" si bien ha reconocido que pudo írsele "la olla" al ver que empujaba "a mi madre" e intentaba entrar en su casa "buscando venganza".

Luis Enrique A.R. ha declarado en Almería ante el tribunal que preside el magistrado Andrés Vélez que "a lo mejor pude ser yo" dado que encontraron su huella dactilar en el arma homicida, un cuchillo de 23 centímetros de hoja, aunque ha afirmado que no quería "hacerle daño" ya que era su "amigo". "Le he dado de comer, le he dado ropa y mi madre le invitaba en Nochebuena y en Nochevieja", ha revelado.

Según su relato, tras mantener una pelea con la víctima, a quien golpeó con un bastón en la oreja, se fue con un segundo amigo, quien testificará este martes, a comprar droga al barrio de El Puche y después al domicilio de su progenitora, donde se encontraba "cortando la pasta de cocaína" cuando empezó a "oir los chillidos de mi madre".

"Salí del cuarto y vi a Pedro forcejeando con ella e intentando entrar. Le dio un empujón para atrás y a mi se me fue la olla", ha contado. "No recuerdo —ha añadido— si cogí un cuchillo o no. Recuerdo que él salió corriendo y lo seguí hasta el portal y que cuando estaba abriendo la puerta, él se echó la mano a la espalda". En esta línea, ha asegurado que la víctima "iba armada porque dormía en la calle".

A preguntas del fiscal, Luis Enrique V.R., quien se encuentra en prisión desde que fue detenido después de los hechos "con una muy grave alteración de sus capacidades volitivas y cognitivas", ha detallado que horas antes del crimen había estado tomando "cocaína, tranquimazin, metanfetamina, valium 10, whisky, metadona y varias cervezas" y ha reconocido que es drogadicto, al igual que la víctima, desde "los 13 años".

El representante del Ministerio Público, en su primer alegato, ha avanzado a los miembros del jurado que, de ratificarse en acto de juicio el informe forense datado hace un mes, pedirá para él, conocido con el sobrenombre del 'legionario, que se le aplique las atenuantes "muy cualificadas" de toxicomanía y trastorno mental ya que constan "antecedentes de tratamiento en unidades de salud mental" por una patología psiquiátrica disociativa.

"no sabía lo que hacía"

Fiscal y letrado de la defensa han asegurado que coinciden en "lo esencial" que sustenta la acusación contra Luis Enrique V.R., por lo que, una vez en el trámite de informes, el primero podría cambiar la pena de 17 años de cárcel que solicita de manera provisional por una de internamiento psiquiátrico y de tratamiento para su "deshabituación" de las drogas. El segundo ha sostenido ante el jurado que su patrocinado "no sabía lo que hacía", por lo que pedirá la eximente completa.

Según consta en el escrito provisional de acusación del Ministerio Público, Luis Enrique A.R. apuñaló a P.V.R., de 40 años y natural de Gijón (Asturias), en el portal del edificio en el que residía con su madre, en la céntrica calle San Juan Bosco de la capital, después de que la víctima hubiese acudido en varias ocasiones al domicilio a recriminarle que le hubiese pegado durante la pelea.

El crimen se produjo a las 21,45 horas del 5 de mayo de 2008. Procesado y víctima, que se conocían desde hacía años y solían quedar para consumir bebidas alcohólicas, habían estado de madrugada en el bar 'Los Corrales' de El Barrio Alto donde, a raíz de unos juegos con una pistola de agua, se enzarzaron en una riña que terminó con P.V.R. propinando un golpe en la oreja con un bastón a Luis Enrique A.R.

Pasadas las 05,00 horas, el procesado abandonó el local y con otro amigo se dirigió, tras adquirir "una pequeña cantidad de cocaína", hasta el domicilio que compartía con su madre. La víctima acudió más tarde al inmueble y, por el interfono, pidió hablar con él en varias ocasiones aunque la madre, conocedora de la pelea, se negó.

Ante la insistencia de P.V.R., el otro amigo accedió a hablar con él en el portal. Le pidió que se tranquilizase y le esperase allí ya que lo iba a llevar hasta la barriada de El Puche para que pudiese adquirir droga. Sin embargo, a las 21,45 horas, volvía al lugar y lograba llegar hasta la puerta de la vivienda.

La madre del acusado, según detalla el escrito de calificación fiscal, sí abrió en esta ocasión aunque logró entorpecerle la entrada hasta que Luis Enrique A.R., al oír el altercado, salió de su habitación, cogió un cuchillo jamonero de 23 centímetros de hoja y se encaró con P.V.R., que se dio a la fuga.

El acusado le dio alcance en el portal y, resalta del fiscal, aprovechando la huida, le asestó "por la espalda y con la intención de acabar con su vida" una puñalada "mortal de necesidad" en el costado que le atravesó el hígado y el ventrículo derecho del corazón. Los facultativos del 061 que le atendieron cuando quedó tendido sobre un banco de la calle tan solo pudieron certificar el fallecimiento.

La vista oral se reanudará este martes a las 10,00 horas con la declaración como testigo de la madre del acusado, el amigo que, en el momento del crimen, estaba con él en su casa consumiendo drogas, y el agente de la Policía Local de paisano que halló a P.V.R. malherido en un banco y dio aviso a los servicios sanitarios y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y cuyo testimonio ha tildado de "muy importante" el fiscal "para conocer cuál era el estado de Luis Enrique en ese momento".