Agentes de la Policía Local de la Pobla Llarga (Valencia) detuvieron el domingo a un hombre acusado de intentar quemar a su mujer y a un agente que intentaba disuadirle de su propósito en su vivienda de esta localidad. El matrimonio había tenido una fuerte discusión familiar, según consta en las diligencias policiales consultadas por Europa Press.

El incidente tuvo lugar en la tarde del domingo en una vivienda de la calle Santa Ana, número 53. La mujer del detenido avisó sobre las 16.50 horas a la Policía para que se presentase en su vivienda puesto que aseguraba que su marido había bebido mucho y le había amenazado de muerte, diciéndole frases como 'le voy a pegar fuego a la casa contigo dentro'.

Una unidad de Policía se desplazó hasta el lugar indicado por la mujer y desde el exterior ya oía una fuerte discusión entre la pareja. Un agente llamó a la puerta y la denunciante la abrió para que pasase. Una vez allí, vio que la pareja estaba nerviosa y, ante esta situación "tan extrema", invitó a la mujer a que abandone la casa para calmar los ánimos entre ellos.

Acto seguido, ya fuera del domicilio, el agente realizó varias llamadas a la Guardia Civil y a la Policía Local, y otros agentes se personan en el lugar de los hechos.

Una vez de nuevo en el interior de la vivienda, el agente y la mujer observaron cómo el detenido salía desde el final de la misma con una garrafa de gasolina, con la que roció tanto a su mujer como al agente que se encontraba cerca de ella. Luego la dejó caer al suelo y provocó un gran charco de gasolina, mientras se abrazaba a su esposa con un mechero en la mano con la intención de quemar a ambos.

Ante esta situación, el agente de Policía Local rescató a la mujer de los brazos de su marido y la sacó de nuevo a la calle junto a su suegra, que también se encontraba en el interior de la vivienda. Una vez fuera, las mujeres entraron en casa de una vecina, donde se refugiaron.

El hombre se encontraba fuera de sí, diciendo frases como 'voy a pegarle fuego a todo'. También puso una estufa de butano y una botella suelta encima del charco de gasolina mientras portaba en su mano derecha un mechero con la intención "clara y manifiesta" de emularse y provocar una explosión dentro del inmueble.

Los agentes y familiares allí presentes intentaron desde el exterior calmarlo y que desistiese de su obsesión, aunque él hacía caso omiso. Cuando el oficial-jefe de la Policía Local observó que levantó las manos con un papel impregnado de gasolina y un mechero, corrió y se abalanzó sobre él, en colaboración con el yerno de éste. Ambos consiguieron su inmovilización. Luego, agentes de la Guardia Civil lo detuvieron.

Seguidamente, una unidad del Servicio de Ayuda Médico Urgente (SAMU), tras tranquilizarle y estabilizarle, lo trasladó hasta el Hospital de Luiz Alcañiz de Xàtiva (Valencia), según han informado fuentes del Ayuntamiento de la Pobla Llarga.