El titular del Juzgado de instrucción número 9, Enrique Morell, ha citado a declarar a la portavoz de UM, Cati Julve, como imputada el próximo viernes, día 21, dentro de la operación Cloaca, según han confirmado fuentes judiciales a Europa Press.

Una imputación que se produce después de que estallara la semana pasada un nuevo caso de corrupción relativo a una presunta trama para favorecer a empresas dedicadas al proceso de reciclaje selectivo vinculadas al Consell de Mallorca. En la primera fase de la operación un total de seis personas fueron detenidas.

En relación al caso, Cati Julve declaró a Europa Press que se desvincula totalmente de la trama, en torno a la presunta emisión de facturas falsas y cobro de comisiones desde el departamento de Medio Ambiente del Consell de Mallorca, que ella gestionaba mientras UM formó parte del Ejecutivo autonómico.

En declaraciones a Europa Press, Julve se desmarcó la pasada semana de las pesquisas, con las que aseguró no tener "nada que ver", y defendió que las facturas en las que estampó su firma durante la época en la que se habrían producido estas irregularidades las rubricó sin saber que estaban infladas o no.

"Yo firmaba pero no tenía ninguna responsabilidad en averiguar si había alguna ilegalidad detrás de ellas, ya que por debajo tenía a 300 funcionarios", ha recalcado.

Es más, Julve negó entonces haber llevado a cabo cualquier tipo de modificación de contratos para beneficiar a las empresas concesionarias de la gestión de residuos sólidos, entre ellas Tirme, e incluso aseguró que ni estas compañías ni el ingeniero técnico industrial encargado de supervisar las facturas relacionadas con la recogida selectiva, así como de controlar la ubicación y gestión de los contenedores de recogida selectiva de la isla, Gabriel Perelló, detenido este miércoles dentro de este nuevo caso, se dirigieron a ella para promover estas supuestas irregularidades.

Además, incidió en que la adjudicación de estos servicios desde el Consell a estas empresas fue materializada en 2003, cuando el departamento de Medio Ambiente, ha señalado, se encontraba en manos del conseller Miquel Àngel Boorràs.