Agentes de la Policía Local de Valencia han detenido este jueves a un joven de 25 años que se encontraba ebrio y que intentó agredir a varias personas y obligó a los coches que pasaban por la zona a parar, e incluso llegó a tirarse en el capó de uno de ellos. El detenido, natural de Bolivia, tiene vigente una orden de alejamiento respecto de la mujer que es la propietaria del vehículo, según han informado fuentes policiales en un comunicado.

Los hechos se registraron sobre las 20.40 horas del jueves cuando la Sala del 092 solicitó la presencia de una patrulla de Policía Local en el cruce de la Avenida Ecuador y la calle Plátanos ya que, según la llamada del reclamante, en el lugar se encontraba un hombre ebrio al que estaban agrediendo varias personas.

Inmediatamente, se presentó una patrulla de la Policía Local de Valencia en la dirección indicada y los agentes comprobaron como un grupo de personas retenía a un hombre en estado "muy agresivo". Los policías averiguaron que, hacía unos minutos, el hombre retenido había llegado al lugar con su vehículo y, tras realizar un cambio de sentido prohibido, estacionar en un paso de cebra y descender del coche, cayó al suelo. Cuando un viandante acudió a socorrerle, éste intentó agredirle.

A continuación bajó a la calzada caminando por la misma, obligando a los vehículos que circulaban a detenerse, llegando a tirarse en el capó de uno de ellos. Después, y tras caerse al suelo en varias ocasiones, se aproximó al vehículo de uno de los testigos y comenzó a golpearlo, causándole daños.

Cuando varias personas le recriminaron su actitud exigiéndole que cesara, el individuo intentó agredir a varios de ellos por lo que tuvieron que retenerlo hasta que llegaron los agentes.

Durante toda la actuación, el hombre mostró una actitud "violenta" hacia los policías y se negó en todo momento a identificarse. Tras realizar una inspección ocular del vehículo que conducía encontraron su NIE y al comprobar los datos se averiguó que tiene vigente una orden de alejamiento de una mujer que resultó ser la propietaria del vehículo.

Los agentes intentaron ponerse en contacto con ella para interesarse por su estado y averiguar el motivo por el que el individuo tenía su coche, sin conseguirlo.