Fomento del uso de la bici y falta de espacios para aparcarlas. Esta es la contradicción en la que está incurriendo el Ayuntamiento de Valencia y que está generando numerosos problemas a los usuarios de este medio de transporte, sobre todo con la entrada en vigor de la nueva ordenanza de circulación que prohíbe atarlas a mobiliario urbano y a árboles.

Y es que, pese a que el Consistorio se comprometió a hacer una campaña informativa de la nueva norma durante el mes pasado y a no sancionar hasta que concluyera hace dos semanas, la grúa ha retirado desde el 1 de noviembre 280 bicicletas por estar ancladas a farolas, señales de tráfico o arbolado.

Así lo han confirmado a 20 minutos fuentes del comité de empresa de la contrata Servicleop Cleop: «La Policía Local nos requiere para retirar una media de cinco bicis cada día. Se llevan al depósito de Valencia Sur o al de Pintor Agrasot».

Sin embargo, en la mayoría de ocasiones, el dueño prefiere no recuperarla por las dificultades que entraña, además del gasto económico que conlleva. Según han asegurado las mismas fuentes, «actualmente tenemos 150 bicis sin recoger en ambos depósitos». Así, muchas personas se desentienden porque primero deben ir al retén de la Policía Local y acreditar que la bici es suya con la factura, algo complicado si tiene varios años. Luego, debe pagar la multa que puede ir de los 50 a los 100 euros y después debe pagar la grúa que vale otros 34,8 euros más 4 euros por día que ha estado en el depósito.

La fiebre ciclista se ha disparado sobre todo este año con la puesta en funcionamiento de Valenbisi, el servicio público de préstamo de bicicletas. A esto, se ha unido el incremento de los itinerarios ciclistas (carril bici y ciclo calles) al pasar de 73 a 130 kilómetros en poco más de un año.

Sin embargo, todas estas medidas no han venido acompañadas de un incremento importante de las plazas de aparcamiento para las bicis. Actualmente, Valencia cuenta con un total de 10.200, de las que 4.000 han sido instaladas por el Ayuntamiento. Sin embargo, están muy localizadas en el centro histórico y facultades, existiendo un gran déficit en los barrios.

Exigen más plazas a través de Facebook

Ainhoa García ha sid ouna de las afectadas. Como ya denunció a través de 20 minutos, dejó la bici atada a una farola junto a su casa, en Francisco Cubells, donde no hay ni un aparca bicis. Cuando bajó sólo había un trozo del candado y una pegatina de la grúa. Ahora, ha creado una página en Facebook bajo el nombre Habiliten las Calles de Valencia Para Aparcar Bicicletas. En pocos días ha logrado más de 500 fans, cada uno con una anécdota sobre los problemas que tienen para estacionar sus bicis.