La responsable jurídica de UCE-Asturias, Cristina Olaguibel, ha advertido este miércoles sobre las cláusulas "abusivas" que tienen como contrapartida los regalos "gancho, envenenados" que ofrecen las entidades financieras para captar clientes, como televisores, consolas de videojuegos o incluso iPad, y que en su mayoría no se especifican en la publicidad.

Olaguibel, en rueda de prensa en la sede gijonesa de la UCE, ha puesto el ejemplo de un cliente de un banco que, tras poder cumplir las condiciones sólo 28 de los 30 meses que le obligaba la entidad, le obligan a devolver el dinero del televisor "regalado", por valor de 400 euros. Es más, en las cláusulas figura que el banco, en este caso Banesto, tiene potestad para poder recuperar el dinero directamente de las cuentas, como así ha sido. En este supuesto, recomienda acudir a Consumo a poner la correspondiente reclamación.

Asimismo, ha puesto varios ejemplos de entidades donde, entre otras cosas, obligan a cambio del regalo a domiciliar la nómina o suscribir productos bancarios. En el caso de Banesto, por domiciliar por primera vez una nómina, pensión o ingreso regular, de al menos 1.500 euros netos al mes, así como tres recibos principales y tener contratadas tres tarjetas determinadas por un periodo de al menos 30 meses, se obtiene el regalo. Eso sí, aunque los gastos fiscales los paga el banco, el cliente debe abonar 98 euros de gastos de envío. "Son gastos desproporcionados e innecesarios", ha dicho.

Otras entidades obligan a un ingreso mínimo de 300.000 euros y a contratar al menos 50.000 euros en un producto bancario, por un plazo de al menos de 12 meses. Olaguibel ha apuntado que en otros lugares el envío es gratuito, pero no así los gastos fiscales, que son de un 19 por ciento del valor del regalo.

Ante esta situación, ha recomendado tener cuidado con la letra pequeña del contrato; comparar el precio del regalo con el interés TAE que supondría haber optado por una retribución en efectivo, y no en especie; tener en cuenta las limitaciones que supone no poder sacar el dinero hasta que finalice el plazo mínimo contratado; y conocer que las entidades están obligadas a facilitar la correspondiente información fiscal de los regalos.