El Gobierno de Cantabria ha activado el Grupo de Intervención Psicológica para Emergencias y Catástrofes (GIPEC) tras el incendio que se ha registrado este martes en Santander y que ha causado la muerte a dos mujeres de 84 y 95 años de edad, hermanas.

El GIPEC es un grupo creado hace cinco años para dar asesoramiento psicológico a víctimas de catástrofes o a familiares de fallecidos y y se presta mediante un convenio entre la Consejería de Presidencia y Justicia y el Colegio de Psicólogos de Cantabria.

Las dos hermanas que han fallecido esta mañana como consecuencia del incendio declarado en su piso de la Colonia Los Pilares 6, Carmen y María Ángeles González Campillo, tenían 84 y 95 años. Se trata de la madre y la tía del ex diputado nacional y ex concejal socialista de Santander, Luis Saez.

Otro de sus hijos, que estaba con ellas en el momento del suceso, está siendo atendido en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla.

El incendio se ha producido en el piso tercero C del bloque BC de la Colonia Los Pinares, concretamente en la habitación que compartían ambas mujeres, por causas que aún se desconocen.

Al ver humo, un vecino ha avisado a los bomberos a las 9.01 horas. Éstos han acudido al lugar en cuatro minutos y han sofocado el fuego en tres, aunque no han podido salvar la vida de las mujeres, que ya habían fallecido probablemente por inhalación de humo.

Como consecuencia del incendio se ha tenido que desalojar a seis personas, una de ellas el hijo de una de las fallecidas, y una familia de cinco miembros residente en el quinto piso, entre ellos dos niños que han sido trasladados a Valdecilla por inhalación de humo de carácter leve.

También ha sido atendido un bombero en el centro hospitalario ya que había dado su mascarilla a uno de los niños, y el hijo de las víctimas, sin que se conozcan las causas.

Al lugar de los hechos se han desplazado 22 bomberos con diversos vehículos, 12 agentes de la Policía Local, Policía Nacional, Policía Científica y Protección Civil. Por su parte, los Servicios Sociales municipales han acudido a Valdecilla para dispensar atención, si fuera necesaria, a los niños y al hijo de la fallecida.

Las dos mujeres vivían con el hijo de una de ellas y eran atendidas por las mañanas por una mujer, que ha llegado al lugar después del incendio.