Más de 50.000 turcos calientan la crisis de los dibujos de Mahoma

Piden el boicot de los productos occidentales. Dos directores de periódicos argelinos, a prisión por publicar las caricaturas.
La crisis por las caricaturas de Mahoma se recrudece día tras día. Más de 50.000 turcos se manifestaron ayer en Diyarbakir, la principal ciudad kurda del país, pidiendo el boicot económico contra los productos daneses, estadounidenses e israelíes.

En Estambul, la capital, la manifestación fue menos multitudinaria, aunque más violenta. Más de 5.000 personas se concentraron frente al Consulado francés lanzando huevos contra su fachada.

Otras ciudades europeas también han sido escenario durante todo el fin de semana de más protestas. Las comunidades musulmanas de Berlín (Alemania), Londres (Inglaterra), París (Francia) y Bruselas (Bélgica) se echaron a la calle el sábado para expresar su rechazo a las caricaturas. En la capital inglesa, la manifestación contó con el apoyo del alcalde, Ken Livingstone, que aseguró que «la publicación de las viñetas ha sido un insulto calculado y barato a los musulmanes». Las protestas en estas capitales europeas transcurrieron sin incidentes.

Periodistas encarcelados

Las viñetas han llevado a prisión a los directores de dos publicaciones argelinas: la revista Esafir y el semanario Panorama. Los dos periodistas han sido encarcelados tras publicar en sus medios las caricaturas de Mahoma.

Los dos directores han asegurado que su única intención era explicar a sus lectores el porqué del malestar islámico ante las viñetas. Los dibujos fueron publicados con una condena a los mismos.

Por otro lado, la Policía danesa está investigando si la profanación de una veintena de tumbas islámicas en el cementerio de la ciudad de Gravlund tiene alguna relación con esta crisis.

También en Melilla y Bilbao

Las protestas por la publicación de las caricaturas de Mahoma en un diario danés también han llegado a España. Centenares de musulmanes se concentraron el sábado en la plaza de España de Melilla denunciando que los dibujos «presentan a la religión musulmana como una religión terrorista y de la Edad Media». La comunidad islámica también se echó el sábado a las calles de Bilbao. Aunque menos multitudinaria que la concentración de Melilla, varias decenas de musulmanas se manifestaron en la plaza Circular. En un comunicado, señalaron que «atacar la dignidad de los Profetas del Islam, es agredir el sentimiento religioso de todos los musulmanes».

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