La Consejería de Agricultura y Pesca, en colaboración con la Asociación Interprofesional de Frutas y Hortalizas de Andalucía (Hortyfruta), ha organizado una visita técnica a invernaderos de Almería y Granada dirigida al grupo de expertos en seguridad del registro de productos fitosanitarios.

La visita ha servido para que los investigadores conozcan las pormenores de las principales técnicas de cultivo bajo plástico, así como los métodos habituales de lucha contra plagas. Esta experiencia, llevada a cabo sobre el terreno y con los testimonios que han aportado los propios agricultores, tiene consecuencias "muy positivas" para el sector de hortícolas en invernadero, ya que los expertos han podido actualizar sus conocimientos sobre el uso de fitosanitarios en la producción agrícola intensiva, a la vez que han obtenido parámetros que pueden ser relevantes en la evaluación de la seguridad previa a la autorización de venta de un nuevo producto fitosanitario.

El grupo de expertos estaba formado por técnicos e investigadores pertenecientes al Instituto de Salud Carlos III, dependiente del Ministerio de Ciencia y Tecnología, el Instituto de Seguridad e Higiene en el Trabajo del Ministerio de Trabajo e Inmigración y al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, responsables de evaluar la seguridad hacia el aplicador y operario agrícola en el proceso de registro de los productos fitosanitarios.

Los expertos han conocido la realidad productiva de cultivos como pimiento, tomate o berenjena, y han podido comprobar las buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios que se llevan a cabo en los cultivos protegidos en el marco de las técnicas de producción integrada implantadas en el sector, según ha informado la Junta en una nota de prensa.

De esta manera, los técnicos e investigadores han obtenido información sobre los productos fitosanitarios más compatibles y mejor adaptados a los métodos de producción que aplican los productores almerienses y ofreciendo a los técnicos las herramientas necesarias para la posible modificación del proceso de evaluación con el fin de ajustarlo a las circunstancias reales del sector.

La importancia de la evaluación de la seguridad de los fitosanitarios radica en la necesidad de productos adecuados y legalmente autorizados para garantizar la eficacia del uso de los métodos de producción sostenibles como la producción integrada y la lucha biológica.

Prácticas agrícolas sostenibles

Además del buen uso de fitosanitarios, los expertos han podido comprobar la rápida expansión del control biológico de plagas en cultivos hortícolas protegidos. Este método, basado en el uso de insectos beneficiosos, ha experimentado un espectacular crecimiento en los últimos años gracias al esfuerzo realizado por la Consejería de Agricultura y por el sector.

Actualmente, más de 15.000 hectáreas localizadas en las zonas productivas con mayor superficie de cultivos hortícolas protegidos como son Almería y Granada emplean las sueltas selectivas de insectos. La experiencia generada en Andalucía durante más de un lustro en la puesta en funcionamiento de programas experimentales para seleccionar los métodos de control más respetuosos con el medio ambiente, ha posibilitado el desarrollo de protocolos de uso de agentes de control biológico contra las principales plagas de los cultivos hortícolas como la mosca blanca, trips y pulgones, en los que ya se ha contrastado el éxito de estos sistemas de lucha.

En su recorrido por los invernaderos almerienses, los técnicos han podido comprobar la implantación de estos sistemas como alternativa a los productos químicos para luchar contra las plagas, mientras que, durante el recorrido por las instalaciones de la empresa Agrobío, han podido conocer los métodos de ría y reproducción a gran escala de los insectos auxiliares.

El sector hortofrutícola es uno de los más importantes tanto a nivel económico como en el ámbito comercial y social, ya que, además de ser el área agrícola que más empleo genera, las frutas y hortalizas representan el 55 por ciento de la producción de la rama agraria de Andalucía. Además, esta producción tiene una gran relevancia en la balanza comercial andaluza dada la alta exportación de los productos hortofrutícolas.

Anualmente, se producen en Andalucía cerca de siete millones de toneladas de frutas y hortalizas, representando estas últimas más del 75 por ciento del total y cultivándose más de la mitad de modo intensivo, bajo plástico o en invernadero con otros tipos de cubierta.