Castilla y León permanecerá mañana, 5 de diciembre, en alerta amarilla por riesgo de fuertes vientos, lluvias y nevadas, según datos recogidos por Europa Press de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y de la Delegación de Gobierno.

En concreto, la alerta por lluvias se activará en el Sistema Central abulense desde mediodía y hasta el final de la jornada, ya que podrán recogerse hasta 40 milímetros en esas doce horas. Asimismo, esta zona permanecerá en alerta por riesgo de nevadas, que podrán dejar en las primeras horas acumulaciones de hasta cinco centímetros, y de fuertes vientos, ya que podrán alcanzarse rachas de 80 kilómetros por hora.

Las fuertes nevadas también mantendrán en alerta a las provincias de León y Palencia, así como al Sistema Central de Segovia y a la comarca zamorana de Sanabria, donde la nieve acumulada oscilará entre los cinco y los diez centímetros.

Por ello, el Comité Ejecutivo Autonómico en materia de vialidad invernal ha decidido prorrogar la alerta en las carreteras de la Comunidad, al tiempo que ha advertido de la posible formación de placas de hielo en las mismas.

Asimismo, toda la Comunidad, salvo la meseta de Ávila, Segovia, Soria y Zamora; la comarca leonesa del Bierzo, y el norte de Burgos, permanecerá en alerta por fuertes vientos que podrán alcanzar rachas de hasta 80 kilómetros por hora.

El Comité Ejecutivo Autonómico se reunió ayer, a través del sistema de videoconferencia, en León para analizar la situación y, aunque retiró el nivel de 'pre-emergencia' establecido la noche anterior en algunas provincias, sí que decidió mantener el nivel de alerta hasta una mejora en las previsiones meteorológicas.