La Guardia Civil ha puesto en marcha una serie de "planes específicos" contra los robos en el campo, según ha señalado este martes el vicepresidente del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha confiado en que la posible "alarma" entre los ciudadanos de las zonas rurales se "disipe".

Durante su intervención en la sesión de control al Gobierno en el Senado, Rubalcaba ha indicado que la creación de ese plan específico surgió a raíz de conversaciones con asociaciones de agricultores y que lleva en marcha "poco tiempo", desde el 15 de noviembre.

Por otra parte, ha mantenido que la Guardia Civil trabaja "día y noche" contra los robos en zonas rurales y ha subrayado que durante seis años su plantilla ha ido aumentando "progresivamente", pasando de 69.000 a 84.000 efectivos.

Asimismo, se han creado 211 nuevos puestos principales que "permiten estar 24 sobre 24 horas trabajando en zonas rurales" y ha detallado que el plan estratégico considera específicamente hurtos y robos que, a veces incluyen violencia. Además, hay planes específicos en la época de recolección de la aceituna y contra el robo de cobre, uno de los más habituales en el campo.

"sentimiento generalizado de indefensión"

Por su parte, el senador por Sevilla Miguel Ángel Arauz ha indicado que en el campo "se va imponiendo un sentimiento generalizado de indefensión, impotencia y rabia" y ha mantenido que sólo se denuncian el 10 por ciento de los robos, "por culpa de la falta de confianza en que se pueda llegar a recuperar lo sustraído".

Para luchar contra la "espiral de inseguridad ciudadana que sacude al campo español", el senador 'popular' ha ofrecido al ministro 11 medidas concretas, al considerar que las actuaciones realizadas hasta la fecha son "absolutamente insuficientes" y "no sirven para frenar el problema".

Concretamente, ha pedido más guardias civiles y más policías nacionales para las zonas rurales, acuerdos con los ayuntamientos para incorporar a las policías locales a la seguridad integral del territorio y también agentes de medio ambiente y guardias rurales y forestales que desarrollen labores de vigilancia y seguridad de las explotaciones.

Arauz también ha planteado la necesidad de que se reforme el Código Penal para endurecer las penas relativas a estos delitos, y que se consideren delitos en vez de faltas las sustracciones por valor superior a 100 euros.

Por último, ha reclamado coordinación entre juzgados para luchar contra la multirreincidencia y que se extreme el control sobre los libros de registros de los puestos receptores de productos agrícolas así como de las chatarrerías, en este caso debido a materiales como el cobre. También ha propuesto que se modifiquen los seguros agrarios para que se incluyan los robos.