La plantilla de la Empresa Municipal de Desarrollo de Palomares (Emdespal), cuyo capital social ostenta en solitario el Ayuntamiento de Palomares del Río (Sevilla), ha negado este lunes que la manifestación espontánea celebrada el pasado 15 de noviembre por el colectivo de trabajadores, sometidos a un expediente de regulación de empleo (ERE), derivase en "agresión alguna". Frente al testimonio del primer teniente de alcalde y consejero delegado de la empresa, Manuel García Ogalla (PSOE), la plantilla alega que la protesta fue "pacífica".

En un comunicado, el delegado de Personal de Emdespal por CCOO Manuel Guerreiro asegura que García Ogalla "falta a la verdad, ya que la supuesta agresión no se produjo en ningún momento. No existe informe al respeto de la Policía Local, presente en todo momento durante esta manifestación que fue pacifica". Los hechos, según el Ayuntamiento, acontecieron la noche del lunes de la semana pasada después de una asamblea celebrada por la plantilla de Emdespal. Los trabajadores de esta sociedad municipal, a quienes el Ayuntamiento adeuda ya cuatro nóminas sin contabilizar el salario correspondiente al mes de noviembre, aceptaron a finales de octubre un acuerdo cerrado entre sus delegados de personal y el Gobierno municipal socialista en cuanto al ERE aprobado por el propio consejo de administración de Emdespal.

Este ERE, según los términos acordados, recoge la extinción de siete contratos, mientras el resto de los trabajadores serán transferidos en calidad de interinos a la plantilla del Ayuntamiento sufriendo una reducción temporal del 30 por ciento en sus jornadas laborales. Cinco de los trabajadores de la escuela infantil asociada a la empresa, además, sufrirán una reducción de su jornada laboral de entre un diez y un 30 por ciento, siempre y cuando se respete la ratio de personal que la normativa de escuelas infantiles establece.

Asamblea y manifestación

De cualquier forma, la asamblea de trabajadores habría debatido los impagos que, al margen de la negociación del ERE, padece el conjunto de trabajadores de Emdespal. Tras esta asamblea, y según informaban a Europa Press fuentes municipales, algo más de 15 de los trabajadores, acompañados de varios familiares, habrían celebrado una protesta espontánea a las puertas del Ayuntamiento, donde se encontraba trabajando el alcalde, Juan Bautista Ginés (PSOE).

Requerido por el alcalde, Manuel García Ogalla habría hecho acto de presencia junto a una dotación de la Policía Local, creciendo así la tensión entre los manifestantes al pretender éstos entrar en el edificio. Cuando el primer teniente de alcalde intentaba acceder al Ayuntamiento, siempre según la versión del Consistorio, se habría producido un "forcejeo" con algún atisbo de "violencia", con lo que los agentes de la Policía Local se vieron obligados a actuar para permitir la entrada del concejal al Consistorio. Manuel García Ogalla, finalmente, fue trasladado por la Guardia Civil al centro de salud de Mairena del Aljarafe, donde fue redactado un parte de lesiones y le fue colocado un collarín a cuenta de las lesiones sufridas en la espalda y el cuello durante el incidente.

Manuel Guerreiro, no obstante, ha reclamado "disculpas y una rectificación" a García Ogalla tras defender que dichas agresiones nunca ocurrieron. Al tiempo, el comunicado de Guerreiro, advierte de que los trabajadores rechazan la "postura y posicionamiento" del también delegado de Personal de CCOO José Huisa, quien había llamado "a la calma" ante los incidentes. "Entendemos que no nos representa, por falta de asistencia a las asambleas, manifestaciones, y a su puesto de trabajo durante días sin justificar y, por supuesto y más grave, declarar en los medios de comunicación faltando a la verdad, porque no estaba en dicha manifestación", concluye el escrito.